El cineasta neozelandés Peter Jackson tenía 18 años cuando leyó por primera vez El señor de los anillos: la comunidad del anillo, de J.R.R. Tolkien. Quedó maravillado con las historias de aventura y pensó en la posibilidad de que en algún momento alguien llevara a la pantalla grande las obras del escritor británico. Como nadie lo hizo, se “impacientó” y tiempo después decidió emprender la hazaña, marcando un hito en el cine de fantasía.
El 10 de diciembre de hace 20 años se estrenó El señor de los anillos: la comunidad del anillo, que se considera aportó significativamente al cine de fantasía y a la manera de adaptar grandes obras de la literatura a la pantalla grande.
“Sí fue un parteaguas, porque nos enseñó cómo debe ser la narrativa de una novela tan amplia, llena de tantas situaciones, contextos y personajes, supo en qué enfocarse. Sí se ahorró muchos pasajes, pero dejó los más representativos y los contó de una manera tan dinámica, tan específica para la pantalla. Puso un ejemplo para los directores y guionistas de cómo adaptar grandes obras para la pantalla grande”, destacó en entrevista con La Razón el crítico de cine Saúl Arellano.
El señor de los anillos: la comunidad del anillo (2001) y las cintas que le siguieron, El señor de los anillos: las dos torres (2002) y El señor de los anillos: el retorno del rey (2003), son hoy un referente, no solamente para las generaciones que las vieron en pantalla, sino para jóvenes, ejemplo de ello, es el proyecto de Amazon, una serie que se espera llegue el próximo año. Busca apelar a la nostalgia, pero también atraer a generaciones que han crecido en el auge de las plataformas digitales.
“El señor de los anillos trascendió el tiempo. Es una película que conecta con las generaciones actuales. Todo el ambiente sociopolítico, no sólo en México sino en el mundo entero, desde el Black Lives Matter, la inmigración, estos gobiernos de ultraizquierda y ultraderecha, hace que se vea con otros ojos porque entienden otras cosas que nuestra generación cuando la vio hace 20 años no miró, porque no estaban tan palpables”, señaló Arellano.
Entre los años 2001 y 2003 la saga de El señor de los anillos no solamente fue un éxito en taquilla, también fue merecedora de distintos galardones: 17 Premios Oscar, entre ellos el de Mejor Director, Mejor Película y Mejor Guion Adaptado; 10 BAFTA, por ejemplo, el de Mejor Guion Adaptado, Mejor Película y Mejor Diseño de Vestuario; y cuatro Globos de Oro.
Fue una superproducción que requirió ocho años de trabajo y alcanzó una recaudación global de más de dos mil 900 millones de dólares.
Los personajes que conquistaron a los espectadores —Frodo Bolsón, Gandalf, Aragorn, Gondor y Gollum— hoy son un referente.
“J. R. R. Tolkien hizo una novela impecable que se puede leer en cualquier periodo de la historia, porque son obras que trascienden el tiempo, tienen esa frescura de tocar temas muy a flor de piel sea de la generación que sea”, resaltó Saúl Arellano.