Las fuertes lluvias y vientos derivados del huracán Hanna, que tocó tierra el pasado sábado y que ayer se degradó a tormenta tropical, provocaron afectaciones severas en viviendas y caminos de Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila y San Luis Potosí; al menos cuatro menores fueron arrastrados por corrientes de agua.
Los primeros daños en nuestro país se reportaron horas después de que el meteoro tocara tierra en Texas, EU, la noche del sábado. En el municipio de San Nicolás de los Garza, Nuevo León, al menos 14 familias fueron trasladadas a hoteles.
En ese mismo estado, Protección Civil asistió la zona cercana al arroyo de Topo Chico —que alcanzó 90 por ciento de su capacidad— para buscar a un menor que fue arrastrado por la corriente; hasta la tarde de ayer aún de desconocía su paradero.
EL DATO: El primer huracán de la temporada del Atlántico 2020 alcanzó vientos máximos sostenidos de 120 kilómetros por hora, con precipitaciones de hasta 30 centímetros.
En Reynosa, Tamaulipas —el municipio más afectado, seguido de Matamoros y Valle Hermoso—, autoridades reportaron severas inundaciones en al menos 20 colonias, donde los habitantes también padecieron la falta de servicios de agua potable y luz eléctrica.
En la colonia Paseo Residencial se reportó la desaparición de tres menores que fueron jalados por la corriente tras caer de un árbol del que se sostenían para evitar mojarse, así como el deceso de una mujer de 32 años, quien se ahogó tras sufrir una caída por crisis epiléptica.
Uno de los inmuebles más afectados fue el Hospital Materno Infantil de Reynosa, que quedó inundado. Videos difundidos en redes sociales muestran cómo el personal médico, de enfermería y camilleros —quienes portaban protección para evitar el Covid-19— intentaban proteger a pacientes del agua que se coló por todos los accesos.
Las inundaciones provocaron que decenas de personas salieran a las calles sin la menor precaución ante la contingencia derivada de la pandemia de coronavirus.
Usuarios de Twitter mostraron imágenes de habitantes varados en las calles, a quienes el agua les llegaba por encima de la cintura y autos cubiertos.
También se reportaron estragos en vialidades clave, que llevaron al cierre de un tramo de 45 kilómetros de la carretera Reynosa-Monterrey, luego de un accidente vehicular, para evitar más incidentes; y hubo derrumbes en al menos dos puntos de la vía Monterrey-Saltillo.
Cierres similares se aplicaron en Coahuila, por deslaves, que requirieron vigilancia de la Guardia Nacional en el tramo Puerto México-Ojo Caliente.
El paso también se obstruyó en la carretera 57, a la altura de Los Chorros, al sureste del estado, a causa del deslave de un cerro que bloqueó el camino y dejó un automóvil varado entre los escombros.
En la Huasteca potosina, la Guardia Nacional montó un operativo para evitar el tránsito por zonas en riesgo. Pese a la caída de árboles y suspensión de la energía eléctrica, Protección Civil del estado informó que los daños fueron “mínimos”.
