El día de hoy se dió a conocer una confusión registrada en el Hospital Regional del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Madero, donde por error se mandó a cremar el cuerpo de un adulto mayor, confundiéndolo con un paciente con COVID-19.
De acuerdo con los testimonios de la familia del adulto mayor que fue incinerado por error en Tamaulipas, el hoy occiso no murió por COVID-19, por lo cual la medida era innecesaria, además de que nadie dió autorización para disponer así de los restos del señor Evaristo Sánchez Cázares, quien tenía 82 años de edad y padecía cáncer de hígado.
Es por ello que de acuerdo con medios locales, los familiares del adulto mayor se presentaron en el IMSS de Madero con el objetivo de entablar diálogo con autoridades del lugar y exigir justicia por el hecho al que catalogan como negligente.
Familia del adulto mayor que fue incinerado sin autorización exige justicia por la confusión
Además, la familia del adulto mayor que fue incinerado sin autorización, espera que se apliquen las sanciones pertinentes contra los presuntos responsables de la confusión.
De hecho, los familiares acudieron a la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas en Ciudad Madero para interponer la denuncia penal en contra de quien resulte responsable de los hechos.
Creman cuerpo equivocado, lo confunden con fallecido por COVID-19 en Ciudad Madero
Según el relato que la hija del hoy occiso, compartió con algunos medios locales, el día que iban a dar de alta al adulto mayor que fue cremado por error, éste sufrió un paro respiratorio y murió. El problema se suscitó una vez que una de las hijas de don Evaristo, fue a recoger el cadáver de su padre, pues en primera instancia no se localizaba el cuerpo.
Pues para entonces los restos del señor ya habían sido incinerados sin la autorización de ningún familiar. Por su parte, Cinthia Yolanda Martínez Sánchez, nieta de don Evaristo, declaró que la familia se rehusa a recibir las cenizas, pues señalan que nada les garantiza que esos sean los restos de su familiar.
En atención a lo anterior, la familia acudió a hablar con el director del IMSS de Madero, para exigir una prueba de ADN que garantice que el cuerpo sea del adulto mayor que fue cremado sin autorización y no se trate de otro error.
