El director general del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Milardy Douglas Rogelio Jiménez Pons, dio a conocer que se presentaron 25 amparos para detener el proyecto del Tren Maya.
Al comparecer ante la Comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado, detalló que dichos recursos han sido presentados por 327 personas y detalló que han identificado que 49 –entre personas físicas y morales– se repiten en la totalidad de juicios.
Ante los senadores, confió en que estos recursos no frenen el que reconoció, es uno de los principales proyectos para el desarrollo del sureste del país, ya que recorre cinco estados de la región.
“Si consideramos que esto puede, en un momento dado, ocasionar un paro en la construcción, espero que no sea, porque los tiempos que hemos estimado con la parte jurídica, con la Consejería Jurídica de la Presidencia, es de que esperemos a que se den los resolutivos previos a eso, son programas de obra cuidando que no tengamos intromisión en esas áreas, entonces nosotros confiamos que no sea así, evidentemente la parte contraria intenta parar el proyecto, pero todo esto es válido en la democracia”, declaró.
Durante su comparecencia, senadores como Miguel Ángel Mancera cuestionaron si está garantizado que no haya un impacto ambiental negativo por la construcción del Tren Maya, respecto a lo cual el titular del Fonatur afirmó: “Yo puedo decir que está garantizado, no afectará (el medio ambiente). Es más, hay progresos sustantivos”.
También dijo que está asegurada la protección de las piezas arqueológicas que se están encontrando y, en ese sentido, mencionó que trabajan dos mil arqueólogos, además de que se va a contar con 15 zonas arqueológicas: “En el Tramo 3, que va de Kalkiní a Izamal hay más de 6 mil 400 descubrimientos”, mencionó como ejemplo de los hallazgos que han realizado durante la obra.
Al ser cuestionado por la senadora del PAN, Xóchitl Gálvez, sobre la consulta que se le hizo a los pueblos indígenas de la región sobre la construcción del Tren Maya y la falta de los estudios de impacto ambiental, Jiménez Pons admitió que el proyecto inició aunque todavía lo están completando.
“Sobre los impactos ambientales, estamos en ese proceso de integración (...). El proyecto se ha venido completando. Era imposible un proyecto de mil 500 kilómetros que se tienen que hacer en cuatro años, que tuviese el proyecto completo, sobre todo, ante la falta de información correcta desde un principio. ¿Por qué? Porque ni tipografía había”, indicó.
El director del Fonatur también refirió que están en el proceso del pago de derechos de vía, porque “obviamente hay discusiones y también hubo problemas, hubo gente que se robó la lana, hubo una serie de funcionarios menores que también aprovecharon el uca uca y donde hay dinero siempre hay problemas. Pero el chiste es pagarle a todo el mundo y este es el primer empoderamiento que las comunidades están teniendo sobre su derecho: es su tierra, hay que pagarla”.