Al menos cuatro mil migrantes acamparon frente al Centro de Inspección Aduanera en el municipio de Huixtla, Chiapas, con el objetivo de ejercer presión al Instituto Nacional de Migración (INM) para que les entregue documentos legales y seguir avanzando a la frontera norte con Estados Unidos.
Este miércoles los migrantes alzaron carpas y acomodaron mochilas y pertenencias para comenzar la espera de sus trámites; principalmente visas humanitarias y formas múltiples. La primera con una extensión de permanencia en México de un año y la segunda de un mes, tiempo para que se trasladen al norte a solicitar su estancia legal, antes de que puedan ser detenidos y deportados.
En las carpas improvisadas se ven a familias enteras que piden una solución inmediata, debido a que en Tapachula no han tenido suerte de ser atendidos, debido a que solo dan 50 fichas diarias y la demanda de lugares de es de miles, pero al no tener respuesta, salieron y ahora abarrotaron las oficinas del INM en la localidad.
Los indocumentados reforzaron sus protestas con paros intermitentes en carreteras cercanas, lo que ocasionó tránsito lento en Huixtla y desesperación de algunos conductores, pues de acuerdo a medios locales, dicen que ellos no tienen la culpa de su situación, por lo que exigen les dejen pasar y que ellos colapsen el INM sin dañar a terceros.
La preocupación de las autoridades locales es la falta de higiene, debido que no hay donde bañarse o hacer sus necesidades, aparte de basureros para colocar sus residuos.
Por el momento se desconoce si la caravana reanudará su camino, pues se estacionó de manera permanente en Huixtla.
FBPT