Una menor de 11 años fue quemada dentro de un centro de rehabilitación de Tonalá, Jalisco, donde personas le rociaron alcohol y la atacaron con una máquina de descargas eléctricas.
Los hechos ocurrieron el pasado viernes 22 de julio en el centro Casa de Vida Camina a la Fortaleza; sin embargo, fue hasta el domingo que la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) conoció el caso, luego de que la madre se acercó y les narró lo sucedido, tras presentar una denuncia ante la Fiscalía General del Estado.
En entrevista con La Razón, la directora de Quejas de la CEDHJ, Erika Córdova, detalló que la menor fue llevada al albergue desde el 30 de junio, tras ser diagnosticada con trastorno de ansiedad y depresión que le generaban crisis de autolesiones, motivo por el cual la madre la internó en el centro mencionado.
Luego de que la Comisión emitió las medidas cautelares correspondientes, autoridades realizaron ayer un operativo en el albergue; sin embargo, ya no encontraron a ninguno de los responsables, informó la directora. Agregó que, según los reportes, no contaba con los lineamientos para operar legalmente, por lo que ya fue clausurado.
Erika Córdova precisó que también se investigará el actuar de las instancias que se vieron involucradas en la atención de la menor, pues la primera que recibió a la niña fue la Cruz Verde, donde intentaron hacerle curaciones sin anestesia y donde también no se apoyó a la madre para el traslado de la pequeña. El ministerio público involucrado también será investigado, por no haber actuado de inmediato al presentarse la denuncia.
También compartió que entre 2017 y lo que va de este año se han presentado 15 quejas por presuntas violaciones a derechos humanos de niñas, niños y adolescentes albergados en centros de rehabilitación injustificadamente, más otras 12 quejas donde la violación directa se atribuyó a maltrato en albergues.