Elementos de la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León realizaron un cateo en el domicilio de una empleada del motel Nueva Castilla, donde fue encontrado el cuerpo de Debanhi Escobar el pasado 21 de abril.
El cateo se llevó a cabo el pasado viernes 19 de agosto por parte de agentes de investigación en un domicilio ubicado en la calle John F. Kennedy de la colonia Moisés Sáenz en Apodaca, Nuevo León.
Ahí localizaron 13 objetos que fueron asegurados, tres memorias USB, un estuche de plástico, ocho celulares y una laptop con su cargador.
La trabajadora del motel es investigada por los delitos de encubrimiento y falsedad de declaraciones e informes dados a una autoridad, por lo que también se fijó una audiencia de imputación de cargos que se realizará el 31 de agosto.
Recientemente padres señalaron que ya solicitaron la atracción del caso por parte de la Fiscalía General de la República como lo adelantó el subsecretario de Seguridad federal, Ricardo Mejía Berdeja, el pasado viernes.
En total se realizaron tres autopsias al cuerpo de la joven de 18 años, en la primera, realizada por la Fiscalía de Nuevo León se dijo que su muerte fue por una contusión profunda de cráneo y que seguía viva al momento de caer en la cisterna del motel.
La segunda, que pagaron los familiares arrojó que murió tras ser golpeada varias veces con un objeto en la cabeza, además se dijo que había sufrido abuso sexual y se descartó que se hubiera ahogado.
Y la tercera echa con apoyo del Gobierno Federal señaló que murió por asfixia por sofocación y se descartó que haya sufrido abuso sexual. A la fecha siguen las investigaciones.
DGM