El arzobispo de la Arquidiócesis de Durango, Faustino Armendáriz Jiménez, fue atacado la tarde el pasado domingo 21 de mayo, después de la misa de medio día. El agresor muy probablemente tenga algún trastorno mental, lo que podría impedir que se impute por el delito de intento de homicidio.
De acuerdo con las primeras versiones, el agresor ingresó a la catedral, se dirigió a la sacristía y se refirió a Armendáriz para cuestionarle si él es el arzobispo. Luego de que el jerarca católico confirmara su identidad, el hombre lo atacó con un cuchillo.
La Arquidiócesis de Durango afirmó que el arzobispo Armendáriz está sano y salvo y sin ninguna lesión. El ataque sólo le rompió la ropa y el responsable fue detenido inmediatamente por un sacerdote y un sacristián que estaban presentes para entregarlo con las autoridades.
El padre Noé Soto, vocero de la arquidiócesis, informó que ya se presentó una denuncia por tentativa de homicidio, que ya se encuentra en manos de la Fiscalía estatal. La fiscal general del estado, Sonia Yadira de la Garza Fragoso, detalló que se le están realizando exámenes psiquiátricos al hombre de la tercera edad, quien hasta el momento no ha presentado su declaración.
Puntualizó lo anterior luego de que el adulto mayor, de 70 años, presentó algunas lagunas al identificarse ya que cambió su nombre en por lo menos dos ocasiones.
En entrevista con el periodista Carlos Loret de Mola, el arzobispo de Durango dijo: "La vida te cambia después de sentir que te quisieron matar". El jerarca católico agregó que cree que sí tiene que ver con una condición mental: “Creo que por ahí va, no, no está bien, pero seguramente hay un motivo y hay alguien que lo motivó también… A hacer un acto de esa magnitud, porque es prácticamente un asesinato”, puntualizó.
DGC