Pasa de 15 en mayo a 29 en junio

Robo en transporte se duplica en Coacalco

De acuerdo con el ONC, en el municipio gobernado por el aliancista David Sánchez Isidoro, este delito creció 93.3% entre un mes y otro de este año; extorsiones aumentan 500%

Vehículos de transporte público del Estado de México.
Vehículos de transporte público del Estado de México. Foto: Especial

El transporte público opera con normalidad en el municipio de Coacaldo, Estado de México. Los pasajeros suben y bajan de las combis a toda prisa para llegar a su destino, pero con cierta desconfianza. Agarran bien sus bolsas o mochilas y permanecen alertas.

Ayer se observó poca actividad de las llamadas “autodefensas”, que pusieron en marcha sus propios operativos de seguridad desde el pasado lunes.

Algunas camionetas de transporte concesionado y autos particulares dieron rondines con cartulinas que los identificaban “autodefensas”, en una actividad intermitente.

Un checador de la Plaza Coacalco dijo a La Razón que lo de las autodefensas, “por un lado, están bien, porque los policías municipales de aquí la verdad no hacen nada, pero por el otro, nada más hacen desmadre y afectan al pasaje, por los paros y el tráfico que provocan”.

Choferes y usuarios coincidieron en que los asaltos en las combis se han intensificado en las últimas semanas en este municipio gobernado por el aliancista David Sánchez Isidoro, lo cual es corroborado por las cifras oficiales.

Gráfico
Gráfico

De acuerdo con datos del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC) —tomados a su vez del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública— en Coacalco el delito de robo en transporte público creció 93.3 por ciento entre mayo y junio de este año, ya que las carpetas de investigación pasaron de 15 a 29 entre un mes y otro. Prácticamente el doble.

Además, las extorsiones, otro flagelo del que se quejan los transportistas y que los orilló a crear las autodefensas, aumentó 500 por ciento, ya que en mayo sólo se abrió un expediente y en junio la cifra llegó a cinco.

Un chofer de la ruta Residencial Coacalco refirió que en la ruta de Santa Clara la extorsión “es el pan de todos los días” y reveló que muchos de sus compañeros han preferido cambiar de oficio porque entre la cuenta y el pago de la “renta” a los extorsionadores, no les alcanzaba para vivir.

El conductor compartió su opinión sobe los autodefensas:  “Es bueno y malo, bueno, porque tanto nosotros como los pasajeros nos sentimos más seguros, pero malo, porque tenemos que llegar a eso, protegernos entre nosotros, porque las autoridades municipales no hacen nada. No hay buena seguridad”.

Un compañero suyo del gremio habló de una modalidad especial de extorsión: “El problema es que al principio los colombianos les prestaban a mis compañeros, podían pedir mil pesos y pagaban 40 diarios, ya con intereses pagaban mil 200 o más, pero luego se volvían a endeudar y empezaban las presiones y amenazas para pagar”.

Un usuario también mencionó que “hay muchas ratas en las combis, seguido asaltan y esto se ha recrudecido en los últimos tiempos; cuando no asaltan a uno asaltan a otro, se puede decir que ya nos acostumbramos”.