La Fiscalía General de Justicia del Estado de Zacatecas confirmó ayer que los cuerpos encontrados el pasado sábado en el municipio de Pinos, son de los policías municipales de Villa Hidalgo, secuestrados el 6 de agosto por un grupo criminal.
Asimismo, las autoridades informaron que están en proceso de realizar la entrega de los cuerpos a sus familiares.
Es importante mencionar que en el estado han sido asesinados 23 policías en lo que va del 2023. De acuerdo con el conteo de la organización no gubernamental Causa en Común, con este hecho la entidad se convirtió en el segundo estado con más elementos de seguridad pública fallecidos a manos de la delincuencia organizada.
Fue la Mesa Estatal de Construcción de Paz quien informó el pasado sábado que, como parte de las acciones de búsqueda, fueron localizados los restos humanos en un camino ubicado entre las comunidades de Jaltomate y Nigromante, pertenecientes a Pinos, municipio que colinda con San Luis Potosí y Jalisco.
La madrugada del 6 de agosto los policías fueron privados de la libertad en la comandancia de Villa Hidalgo, en el sureste de Zacatecas. Horas después, la Policía Estatal Preventiva (PEP) asumió el mando de la seguridad del municipio.
Tras el plagio de los uniformados, se realizaron operativos de búsqueda con el apoyo de la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional, en el cual se detuvieron a ocho personas y se aseguró armamento y vehículos, además de que se destruyeron campamentos de células delictivas.
Sin embargo, en menos de un mes han secuestrado a siete policías en el estado.
