El exgobernador de Chihuahua, César Duarte, fue trasladado desde el Centro de Reinserción Social de Aquiles Serdán, donde se encuentra recluido, hasta un hospital privado para revisión médica por presión arterial.
Gilberto Loya, secretario de Seguridad Pública de la entidad, indicó que el estado de Duarte no es grave, por lo que a la brevedad será trasladado de vuelta a la cárcel.
"Tiene un padecimiento de presión arterial, pero se está controlando con medicamentos. Cuando se restablezca, volverá a ser ingresado”, expuso.
El traslado se hizo la noche del domingo a petición de los abogados de Duarte.
Argumentaron que su cliente presentó una decaída en su salud y “era importante checar su presión arterial".
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Leo