Un día después del asesinato del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, los integrantes de la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz reafirmaron que “en Guerrero al margen de la ley nada y por encima de ley nadie”.
Durante una reunión realizada este lunes en la capital de la entidad, los representantes del Gobierno estatal, Sedena, Marina, Guardia Nacional, Fiscalía General de la República y Fiscalía local acordaron reforzar la seguridad con inteligencia, presencia e investigación en todo el estado, “en una suma decidida a la estrategia delineada desde el Gobierno federal en los primeros cien días del gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum”.
Más tarde, la gobernadora Evelyn Salgado escribió en su cuenta de X: “Desde la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz acordamos reforzar la seguridad en todo el estado, con especial atención a la Región Centro. De manera decidida establecimos la suma interinstitucional a la estrategia delineada desde el Gobierno federal con más inteligencia, presencia e investigación, como lo dio a conocer la Presidenta.
“En Guerrero la paz y la justicia son temas prioritarios, en los que los distintos órdenes de gobierno nos mantenemos trabajando de manera coordinada y sin descanso”.
En el encuentro interinstitucional, el nuevo comandante de la Novena Región Militar, Ernesto José Zapata Perez, dio a conocer el refuerzo en las acciones de vigilancia y prevención del delito en la Región Centro e indicó que se acordó mantener estrecha colaboración con el nuevo comandante de la Décima Segunda Región Naval, Ramiro Lobato Camacho.
Ayer, bajo un fuerte resguardo por parte de elementos de la Policía Estatal, decenas de personas, entre amigos, familiares, militantes del PRI y del PRD y habitantes de varias colonias de Chilpancingo, dieron el último adiós al alcalde mediante una misa de cuerpo presente realizada en la Iglesia de la Santa Cruz.
Los asistentes colocaron veladoras y flores a las afueras del templo, así como fotografías de la víctima, y hubo algunos que desplegaron cartulinas con mensajes en los que exigían “justicia”.
Aproximadamente a las 10:45 horas llegaron al lugar el exgobernador del estado, Héctor Astudillo; el extitular de Finanzas estatal, Tulio Pérez Calvo, y los exdiputados locales Gabriela Bernal Reséndiz y Héctor Apreza Patrón.
Al salir de la iglesia, Héctor Astudillo dijo que se sumaba al duelo que embargaba a la familia de Arcos Catalán y a todo Chilpancingo. Además, calificó el crimen ocurrido el domingo como un hecho “fuerte, reprobable y lamentable”, y pidió que no quede impune.
El diputado local del PRI, Alejandro Bravo Abarca, a través de sus redes sociales, envió sus condolencias a la familia y amigos del alcalde de Chilpancingo. “Me uno de corazón a la pena que embarga a las familias Arcos Catalán y Arcos Solís por el sensible fallecimiento de mi amigo Alejandro Arcos Catalán, a quien recordaremos con afecto y como alguien comprometido con su pueblo, cariñoso con su familia y respetuoso con quienes lo rodeaban”, escribió el legislador.
Su compañera de bancada, Beatriz Vélez Núñez, lamentó el asesinato “de quien con entusiasmo asumió la presidencia municipal de Chilpancingo. Su pasión por servir a nuestra comunidad y su deseo de generar cambios positivos siempre serán recordados”.
El diputado local del PRD, Robell Urióstegui Patiño, condenó enérgicamente lo que calificó como un “crimen cobarde”, y pidió justicia. “No fue solamente ejecutado un líder, sino un amigo, un padre de familia, un esposo e hijo”, lamentó el perredista.
A la misa de cuerpo presente llegó la expresidenta municipal de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, quien fue rechazada por varios de los presentes, los cuales le gritaron “asesina” y “tú lo entregaste”, entre otros reproches.
Ante el entorno adverso, la exalcaldesa, recientemente expulsada de Morena, optó por retirarse del lugar.
El crimen ocurrido el pasado domingo ocasionó temor entre la población de Chilpancingo, por lo que se observó poca afluencia de gente en las calles y algunas escuelas suspendieron clases.
De acuerdo con medios locales, la incertidumbre generó que pocas unidades del transporte público trabajaran y que los negocios abrieran tarde, además de que hubo suspensión de labores en el ayuntamiento, cuyos trabajadores colocaron veladoras, flores y una fotografía del alcalde priista en la entrada del Palacio Municipal.
El Cetis 135 y la Unidad Académica de Derecho de la Universidad Autónoma de Guerrero (Uagro) suspendieron clases por la inseguridad, mientras que otros planteles hicieron lo mismo, pero aclararon que por el pronóstico de fuertes lluvias por la tarde.