La leva de internos en centros de rehabilitación por parte del crimen organizado en Sinaloa es un reflejo del “absoluto colapso” de las autoridades estatales, consideró el experto en seguridad de la UNAM, Javier Oliva Posada.
En entrevista con La Razón, el especialista indicó: “Esta situación refleja el absoluto colapso de las autoridades locales, desde el Gobierno del estado, hasta los municipios; el gobernador debería renunciar, en otros casos ya se le habría removido e incluso estaría sujeto a investigación”.
Mencionó también que la leva de adictos en recuperación, que se ha intensificado en los últimos días, es un claro indicio de que el crimen organizado ya no cuenta con suficientes sicarios para seguir su confrontación interna a muerte que mantiene en Sinaloa.
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Agregó que, como se trata de personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad física y mental, el crimen se aprovecha y se lleva, casi siempre de manera forzada, a estas personas.
Oliva Posada apuntó que la presencia por unos días del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, en Sinaloa, fue una buena señal, en el sentido de que no debe haber terreno en donde el Estado mexicano no se pueda imponer, aunque no necesariamente es una garantía de que se va a recuperar la paz.
Por su parte, el director del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC), Francisco Rivas Rodríguez, señaló que los grupos en pugna en Sinaloa decidieron recurrir a una práctica que ya se había visto en otras entidades, como lo es el reclutamiento de personas en situación de vulnerabilidad.
Comentó: “El reclutamiento se utiliza para toda la cadena delictiva, desde el halconeo, la distribución de drogas, la venta de drogas y el cobro de derecho de piso, hasta llegar a delitos más importantes, como el sicariato”.
El activista apuntó que el narco opta por reclutar adictos, porque son personas que ya tienen alguna dependencia consolidada, es decir, que han tenido por mucho tiempo algún tipo de dependencia a sustancias y, por lo tanto, son más fácilmente manipulables, a través de esa dependencia que padecen.
Rivas Rodríguez indicó que en muchas ocasiones no hay certeza sobre si los internos son llevados por la fuerza o se van por su voluntad, como argumentan las autoridades de Sinaloa, pero lo cierto es que “sí hay una falla del Estado” cuando se sabe que los jóvenes están incursionando en el delito y no se toman acciones específicas.
A su vez, Leopoldo Rodríguez, consultor en seguridad, consideró que las autoridades están rebasadas en cuanto a su capacidad para controlar al crimen organizado, el cual puede reclutar a personas vulnerables tranquilamente.
“No hay forma de que puedan proteger a personas adictas, mucho menos a personas en general; la ciudadanía vive en un estado de sitio, no sale a las calles, y si sale, lo hace con miedo, la economía está prácticamente quebrada”, dijo.
E insistió: “Pocas veces se escucha entre colegas analistas de seguridad conceptos que no aplican, pero éste sí aplica, éste es un estado de sitio”.
DOS GENERADORES MENOS. En tanto, en una acción realizada por instituciones del Gabinete de Seguridad junto con Interpol México, fue cumplimentada en el municipio de Guamúchil, Sinaloa, una orden de aprehensión con fines de extradición en contra de Julio César Méndez Vega, alias El Spider.
El presunto delincuente, considerado un operador de alto nivel del grupo de Los Chapitos dentro del Cártel de Sinaloa, es requerido por la justicia de Estados Unidos, por la agencia U.S. Marshals, por delitos contra la salud.
Su detención estuvo a cargo de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), la Secretaría de Marina (Semar) y la Guardia Nacional (GN).
El Gabinete de Seguridad informó que, al dar continuidad a las líneas de investigación sobre generadores de violencia en la región, se dio seguimiento a la persona que coincidía con los requerimientos de las autoridades de Estados Unidos, tras lo cual se inició un operativo que concluyó con la detención del presunto criminal.
En otra acción fue aprehendido José García Delaherran en la esquina de las calles Santa Teresa de Calcuta y Francisco Verdugo, colonia Villa del Real, en Culiacán, quien también es requerido por la justicia de Estados Unidos.
Por la mañana, durante la conferencia de prensa de la Vocería del Gobierno estatal, Karina Elizabeth Márquez Calderón, titular de la Comisión Estatal de Búsqueda en Sinaloa, dijo que un total de 465 personas han sido reportadas como desaparecidas del 9 de septiembre a la fecha.
La funcionaria precisó que, tras dar seguimiento a estas denuncias, 85 personas fueron encontradas con vida; sin vida 21, y continúan desaparecidas 359.
Por otro lado, sobre la avenida Del Mar, justo en donde se encuentran las icónicas letras de Mazatlán, un grupo de ciudadanos realizó una manifestación para exigir la localización con vida de Óscar Aguilar Coatzin, quien está desaparecido desde el pasado 9 de diciembre.
De acuerdo con familiares y amigos, Óscar fue privado de su libertad por sujetos armados, quienes entraron en su domicilio, en la colonia Insurgentes, de Mazatlán, alrededor de las 03:40 de la madrugada.
Los manifestantes bloquearon el cruce de la avenida Del Mar con la avenida Rafael Buelna, lo que causó la interrupción del tránsito vehicular en la zona y, posteriormente, marcharon hacia las instalaciones de la Fiscalía General del Estado, en la zona sur, en donde exigieron resultados.
