Personal del restaurante Chili’s, ubicado en Plaza Américas de Xalapa, Veracruz, obligó a un hombre con discapacidad visual a retirarse del lugar, por estar acompañado de su perro guía, este hecho causó indignación este jueves en redes sociales. En La Razón de México te contamos todos los detalles del caso.
Lo anterior ocurrió el pasado 24 de diciembre, cuando el gerente del establecimiento se acercó a la mesa en donde estaba el joven y le pidió que se retirara, debido a que las políticas de la empresa prohíben la entrada “con mascotas”.
El afectado argumentó que su perro guía, Bold, no es una mascota sino un animal entrenado para asistir a personas con discapacidad visual, pero el gerente de Chili’s de plaza Américas mantuvo su postura, por lo que el joven Miguel Ángel se tuvo que retirar.
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Usuarios de redes sociales también se pronunciaron y realizaron los siguientes comentarios:
- “Profeco esto amerita clausura”
- “Ya no les pueden negar el acceso”
- “Un restaurante no es un lugar público, es una empresa”
Chili’s ofrece disculpa por discriminación
Más tarde, la empresa aseguró que el restaurante Chilis tiene una política de inclusión, por lo que sus sucursales “son espacios que cuentan con políticas accesibles para todo público”.
En este sentido ofreció una disculpa al hombre con discapacidad visual.
“El incidente ocurrido recientemente en uno de nuestros restaurantes y queremos expresar nuestras más sinceras disculpas a nuestros comensales”, afirmó en un comunicado.
Esto dice la Ley del Consumidor sobre este tipo de casos
Este caso, puede violar el artículo 58 de la Ley Federal del Protección a los Derechos del Consumidor, mismo que indica que no se puede negar el servicio ni cobrar cuotas extra por el perro guía, además de que son muy nobles.
“Los perros guía no son mascotas, son animales de servicio que desempeñan una labor de asistencia muy importante para las personas con discapacidad visual, ya que prácticamente se convierten en sus ojos, ayudándole a evadir una infinidad de obstáculos, que podrían representar un peligro”, indicó el Consejo Nacional para el Desarrollo y la Inclusión de las Personas con Discapacidad en un comunicado.
Un caso similar ocurrió en el hotel Safi
El pasado 19 de diciembre, una joven de nombre Sary denunció que el personal del hotel Safi, en el centro de Monterrey, le negó el acceso a ella y a su perro guía.
Ese día, Sary intentó ingresar al establecimiento para asistir a una posada de su trabajo, pero personal del hotel le prohibió la entrada, con el mismo argumento: no se permitía el ingreso “con mascotas”.
Finalmente, el personal del hotel le permitió la entrada luego de que la joven amenazara que iba a llamar a la policía, no sin antes decirle que “por esta vez” los iban a dejar pasar.
JVR
