La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno federal, encabezada por Omar García Harfuch, investiga el asesinato de los menores de edad Alexander y Gael, y de su padre, perpetrado aparentemente tras un intento de asalto en Culiacán el pasado domingo.
El secretario general de Gobierno de Sinaloa, Feliciano Castro Meléndrez, hizo el anuncio en conferencia de prensa extraordinaria momentos después de que terminara una marcha en la que aproximadamente cinco mil ciudadanos exigieron justicia y causaron destrozos en el Palacio de Gobierno.
“Les comparto que personal de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, es decir, la instancia federal, tiene en Sinaloa un cuerpo de investigación que atiende el caso concreto de estos dos niños”, expresó.
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A nombre del gobernador Rubén Rocha Moya, el funcionario afirmó que las autoridades estatales comprenden la indignación de la población ante el asesinato de los menores y descartó que vaya a haber represalias en contra de quienes vandalizaron la sede del Poder Ejecutivo local.
“La situación de violencia e inseguridad por la que cursa Sinaloa nos indigna, particularmente el fallecimiento de los niños, víctimas de una muerte impuesta por la violencia,” declaró.
Y agregó: “El gobernador los esperaba, les hicimos llegar la propuesta a quienes estaban encabezando la manifestación, el Gobierno de Sinaloa no reprime a la gente, somos un Gobierno abierto a los procesos de manifestación”.
La marcha para exigir justicia inició cerca de las 09:00 horas en la escuela primaria Sócrates, ubicada en la calle Aguilar Barraza esquina con Andrade.
Al grito de “¡A los niños no!”, los manifestantes recorrieron varias calles hasta llegar al Palacio de Gobierno, en el cual irrumpieron y exigieron un diálogo con el gobernador, quien no se encontraba en esos momentos en el inmueble.
Pese a la presencia del personal de seguridad, los manifestantes rompieron los cristales de la puerta que da acceso a los niveles superiores del edificio y subieron al tercer piso, para dirigirse a la oficina del jefe del Ejecutivo estatal.
Una vez ahí, varias personas enfurecidas rompieron un muro de plafón, derribaron la puerta de la entrada al despacho, hicieron pintas, voltearon algunos sillones y destrozaron un sinfín de documentos. Al menos dos personas resultaron con lesiones leves durante la ruptura de cristales.
Hubo quienes incitaron a prenderle fuego a las instalaciones, pero los ánimos se calmaron cuando salió a dialogar el subsecretario de Gobierno estatal, Rodolfo Jiménez.
Media hora antes de que empezara la marcha, hombres armados emboscaron una patrulla de la Policía Municipal de Culiacán, tripulada por cuatro oficiales, de los cuales dos perdieron la vida y dos resultados gravemente heridos.
Durante la fuerte balacera, una mujer que caminaba por la zona del Parque 87 fue alcanzada por las balas, por lo que fue trasladada a un hospital.
Los hechos ocurrieron a las 08:30 horas, cuando la camioneta 0768 de la Policía Municipal circulaba por la avenida México 68. De manera sorpresiva, unos metros antes de llegar a la avenida Álvaro Obregón, sicarios atacaron a la unidad con armas largas desde dos puntos distintos, sin dar oportunidad de reaccionar a los uniformados.
Al escuchar los disparos, la gente que caminaba por los alrededores corrió para resguardarse, mientras que la camioneta quedó sobre la avenida México 68 con las víctimas adentro, con varios cristales destrozados y con diversos impactos de bala en la carrocería.
Según testigos, durante la agresión el conductor de la patrulla alcanzó a avanzar un poco, hasta quedar afuera de una refaccionaria, pero los gatilleros no dejaron de disparar, por lo que la unidad oficial ya no se movió más.
Más temprano, hombres armados destruyeron con un explosivo casero parte del altar erigido en el 2008 en memoria de Édgar Guzmán López, hijo de Joaquín El Chapo, Guzmán, en el estacionamiento del City Club, sobre el bulevar Universitarios. Junto al cenotafio semiderribado quedó un auto particular de color azul con impactos de arma de fuego en la carrocería.
En tanto, en el transcurso de ayer al menos dos personas fueron ejecutadas, entre ellas el influencer Adalberto Peña Urquídez, conocido como Adal Peña o El Tata, de 42 años de edad, quien fue atacado a balazos cuando hacía ejercicio sobre la avenida Rotarismo, frente a una plaza comercial del fraccionamiento Bonanza, en el sector del Desarrollo Urbano Tres Ríos, en Culiacán.
De igual forma, sobre un camino que se encuentra al sur del ejido El Carrizalejo, en el municipio de Culiacán, fue localizado el cuerpo de una persona del sexo masculino, tirado boca arriba, con las manos amarradas hacia el frente y con varios impactos de bala.
