Construcción de vías férreas

Alertan impacto de Tren Ímuris en áreas verdes y zonas de aves

La manifestación de Impacto Ambiental detalla que en la superficie serán construidos un túnel, talleres, entre otros; colectivo urge a atender la protección del entorno

Imágenes de las zonas en las que se llevan a cabo las obras para la construcción del Tren Ímuris, en Sonora.
Imágenes de las zonas en las que se llevan a cabo las obras para la construcción del Tren Ímuris, en Sonora. Foto: Cortesía Sergio Müller

La Secretaría de Infraestructura y Desarrollo Urbano del Gobierno de Sonora informó que las obras del Tren Ímuris afectarán una superficie de seis millones 297 mil 292 metros cuadrados para la construcción de vías férreas, así como de talleres, un túnel, zona de vagones, entre otros, que afectará áreas verdes y zonas para aves.

De acuerdo con la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) Modalidad Regional, elaborada por la empresa Grupo Selome, S.A. de C.V., este proyecto tendrá dos tramos de vías nuevas: Ímuris-Miguel Hidalgo, con una longitud de 63.152 kilómetros, y Conexión-Frontera, con 9.586 kilómetros. Ambas líneas están a cargo de Ferrocarril Mexicano, S.A. de C.V.

Las autoridades informaron que el proyecto tiene como finalidad potenciar y mejorar el flujo de mercancías entre los estados del noroeste de México y el suroeste de Estados Unidos.

El documento, publicado el pasado 12 de abril, cerca de siete meses después del inicio de la obra, afirma que la obra no incide en ningún área natural protegida, sólo incide en al menos dos Áreas Destinadas Voluntariamente a la Conservación.

Sobre este punto se precisa que se gestionó la modificación de su poligonal antes de iniciar los trabajos, además hay un compromiso para implementar distintas acciones ambientales, entre ellas, rescate y reubicación de flora y fauna silvestres, pasos para animales y un programa de manejo y vigilancia animal.

Imágenes de las zonas en las que se llevan a cabo las obras para la construcción del Tren Ímuris, en Sonora.
Imágenes de las zonas en las que se llevan a cabo las obras para la construcción del Tren Ímuris, en Sonora. ı Foto: Cortesía Sergio Müller

En el pasado mes de noviembre colectivos ambientalistas, como Caminantes del Desierto A.C., denunciaron la construcción de un tren de carga con ruta del municipio de Ímuris al de Nogales, en la sierra del estado, sin la publicación del proyecto de impacto ambiental.

Los inconformes acusaron que diferentes especies se ponían en peligro con la construcción de esta obra, pues en ella habitan ejemplares de jaguar, ocelote, oso negro, coyotes, venados, luciérnagas, aves y reptiles que están protegidos por la Norma Oficial Mexicana 059 de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Las autoridades prevén una inversión de siete mil millones de pesos para esta obra concesionada a la empresa Ferromex, de grupo México.

En noviembre, el secretario de Gobierno, Adolfo Salazar Razo, dijo que los trabajos han sido avalados por los pobladores.

El funcionario mencionó que es un proyecto a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional con recursos del Gobierno federal, aunque desde la administración estatal están al pendiente de lo que se requiera para concretarlo.

A seis meses de la denuncia de colectivos ambientalistas por esta construcción, ésta no se ha detenido.

Según la MIA, la construcción de los dos tramos del Tren Ímuris incide en la Región Hidrológica Prioritaria, denominada Subcuenca de los ríos San Pedro y Santa Cruz. La obra también incide en sitios Epicontinentales Acuáticos.

El documento señala que los dos tramos del Tren Ímuris inciden en el llamado Sistema de Sierras de la Sierra Madre Occidental, la cual es un Área de Importancia para la Conservación de las Aves.

El director del colectivo Caminantes del Desierto, A.C., Sergio Müller, señaló que, a pesar de diferentes denuncias presentadas por el colectivo y habitantes para frenar la obra para saber cómo se cuidará el medioambiente, ésta continúa.

“La obra sigue su curso, no se ha detenido, y de hecho, ya están avanzando.

“Están haciendo un túnel de poco más de dos kilómetros y los vecinos se han mostrado muy inconformes, por lo mismo que nunca vieron el manifiesto ambiental o el cambio de uso de suelo”, detalló Sergio Müller.

El activista señaló que, a pesar de que ya está la MIA, no se define bien cómo será la compensación para que esta obra no represente un daño mayor.

“Falta ver qué dice Semarnat al respecto, ya que está en evaluación en este momento, pero el gobernador (Alfonso Durazo) ha mencionado en conferencias de prensa que se va a reponer uno a uno los árboles, eso no es suficiente, pues los árboles son árboles grandes ya maduros y se van a reponer con plántulas pequeñitas, que no es garantía que vayan a crecer y les va a tomar décadas tener el tamaño de los que están talando”, precisó.

Sobre las medidas de Prevención, Mitigación, Restauración y Compensación por impacto ambiental relacionado con la vegetación, la MIA señala que se implementará un Programa de Rescate y Reubicación de Flora con énfasis en especies que se encuentren incluidas en la NOM-059-SEMARNAT-2010 y otras que puedan tener interés ambiental, sin especificar más.