Elementos del Ejército mexicano, la Guardia Nacional y policías local y estatal de Puebla localizaron un depósito clandestino de combustible en el que tenían almacenados 87 mil litros de hidrocarburos, equivalente a la capacidad de nueve pipas.
Éste es uno de los golpes más fuertes contra huachicoleros en la zona limítrofe entre Puebla e Hidalgo, por donde corre el poliducto Tuxpan-Azcapotzalco.
Los efectivos descubrieron al menos tres tomas clandestinas que tenía una derivación a la comunidad de Los Puentes, en el municipio de Cuautepec de Hinojosa, Hidalgo.
En ese campamento se encontraron aproximadamente 87 mil litros de hidrocarburo robado, siete vehículos, 30 tambos de 200 litros cada uno, 16 tinacos de mil litros, dos tanques hechizos con capacidad para 45 mil litros cada uno y tres mil metros de manguera de alta presión.
Hasta el momento no se reportan detenidos; mientras que personal especializado de Petróleos Mexicanos (Pemex) cerró las tomas clandestinas para evitar un incidente mayor.
Previamente, en Tlahuelilpan, Hidalgo, una comunidad fue desalojada tras detectar una fuga a causa de una toma clandestina.
A través de un comunicado, el municipio informó que la fuga fue controlada casi una hora después por personal de Pemex, pero el olor a combustible permanecería por unas horas más.
Durante el año pasado, el robo de combustible representó pérdidas por cuatro mil 644 millones de pesos, lo que significa que diariamente se robaron dos mil 600 barriles, de acuerdo con el informe de mayo pasado de Pemex; en éste establece que gracias a la vigilancia que ha realizado la paraestatal, se recuperaron cerca de 12 millones 200 mil litros de combustible en 2019.
srv