Por una fuga de combustible causada por una toma clandestina en el municipio de Tetepango, Hidalgo, 200 pobladores de la localidad de Ulapa fueron evacuados la mañana de ayer ante el riesgo que el incidente representaba para sus vidas y su salud.
Con ésta, fueron tres las fugas detectadas en un lapso de 24 horas en la entidad, ya que en la localidad de Motobatha, en el municipio de Mixquiahuala, se reportó la presencia de fuerte olor a gas, lo que hizo que elementos de la policía estatal, de Pemex y de la Guardia Nacional llegaran al lugar, en donde descubrieron una toma irregular sin control.
Y el pasado domingo, en el municipio de Tlahuelilpan, fue reportada otra fuga, situación por la que fue cerrada la circulación en la carretera Tlahuelilpan–Tlaxcoapan mientras se controlaba el flujo de hidrocarburos.
El derrame ocurrido en Ulapa a partir de las ocho de la mañana de ayer ocasionó un chorro de unos diez metros de altura, así como una enorme nube tóxica, por lo que algunos pobladores presentaron mareo y dolor de cabeza, pero fueron atendidos en el lugar por paramédicos y por la Policía Municipal.
Esta fuga provocó una importante movilización de cuerpos de emergencia, los cuales desalojaron a los habitantes cercanos al lugar ante el riesgo de una explosión o una intoxicación.
Los pobladores fueron trasladados a las instalaciones del Sindicato de Electricistas, ubicado en la comunidad de Juandhó, también del municipio de Tetepango, que se habilitaron como albergue para atender ahí a las personas en lo que se controlaba la fuga.
Alrededor de las 11:00 horas la fuga fue controlada totalmente.