Este lunes, Imelda de la Rosa, mamá de los menores Ángelo y Selena, de 14 y 12 años de edad respectivamente, exigió al gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, que las autoridades den con el paradero de sus hijos.
En conferencia de prensa realizada en el Zócalo de Cuernavaca, la madre lamentó que “no hay ni una pista” para saber en dónde están los menores, mientras que las autoridades ya suspendieron la búsqueda, a un mes de que se reportó su desaparición en el área rural del municipio de Yautepec.
Morelos cerró el 2022 con 760 personas desaparecidas y no localizadas, lo que significa un aumento del 60.6 por ciento con relación al 2021, cuando la cifra fue de 473.
Actualmente la entidad ocupa el primer lugar a nivel nacional en tasa de desapariciones, con 38.5 casos por cada 100 mil habitantes.
De acuerdo con datos del Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No localizadas (RNDPDNO), en lo que va de este 2023 —con corte al 6 de febrero— ya se ha reportado la ausencia de 33 personas, casi una por día en promedio.
Dos de estas víctimas son los hijos adolescentes de Imelda de la Rosa, quien junto con su esposo se plantó ayer por segunda vez en el Zócalo de Cuernavaca para exigir que continúe la búsqueda de los menores.
Ante los medios, la madre señaló que la Fiscalía General de Justicia del Estado de Morelos no la ha citado para informarle de los avances en la investigación para dar con el paradero de Ángelo y Selena y para hallar a los responsables de su desaparición, además de que se suspendió la búsqueda de campo.
En sus declaraciones, Imelda le pidió al gobernador Cuauhtémoc Blanco que promueva la reanudación de la búsqueda de los menores hasta que sean localizados “vivos o muertos”.
Recordó que el sábado 7 de enero los dos hermanos salieron de su casa alrededor de las 10 de la mañana, en sus respectivas bicicletas, para pastorear a sus chivos, lo cual hacían con frecuencia, y regresaban casi siempre cerca de las tres de la tarde.
Añadió que ese día ella cubrió horas extras en la cremería en donde labora, en el municipio de Cuautla, por lo que no se pudo percatar de la ausencia de los menores hasta que llegó a casa, cerca de las 21 horas.
Cinco días después de la desaparición, los padres de los jóvenes, familiares y vecinos decidieron bloquear la carretera federal Cuernavaca-Cuautla, como medida de presión para que las autoridades agilicen las investigaciones y sean localizados.
Y el 18 de enero, los padres de los adolescentes realizaron un primer plantón en el Zócalo de Cuernavaca para exigir la localización de sus hijos, protesta que fue replicada ayer.
Otra víctima reciente de desaparición en Morelos es Ángel Tadeo, un pequeño de cinco años de edad cuya ausencia fue reportada el pasado 23 de enero en el municipio de Amacuzac.
Ese día, la Fiscalía General de Justicia del estado emitió una alerta AMBER para pedir a la ciudadanía y a los medios de comunicación su apoyo para la localización del menor.
En su alerta, el órgano de procuración de justicia indicó que se teme que la integridad de este pequeño se encuentre en riesgo, toda vez que puede ser víctima de la comisión de algún delito.
El fenómeno de la desaparición de personas en Morelos se ha presentado acompañado de la constante aparición de entierros ilegales.
De acuerdo con la organización civil Causa en Común, Morelos cerro el 2022 con el hallazgo de 23 fosas clandestinas, todas ellas como consecuencia de la búsqueda que realizan diversos colectivos.
El pasado 13 de enero, la organización Familias Resilientes Morelos localizó dos cuerpos que pudieran ser de personas reportadas como desaparecidas.
La organización publicó en su cuenta de Facebook: “Hallamos dos tesoros, en las imágenes se pueden ver algunas pertenencias. Uno de los tesoros tiene tenis tipo converse de botín y el otro tesoro, tenis color café marca Levis”.
