Al afirmar que el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) es necesario ante las afectaciones por lluvias y sismos en el país, el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, afirmó que la extinción de ese fideicomiso en específico, no es algo para celebrar, "no hay que festejar, ni hay que alegrarnos de que las ayudas posibles se vayan".
Ante medios, Astudillo señaló que si existían defectos tendrían que arreglarse y mejorarse, no desaparecer los fideicomisos.
Sobre los dichos del presidente Andrés Manuel López Obrador de que los fideicomisos servían de "caja chica" para algunos gobiernos estatales, el mandatario estatal dijo que habría que modificarlos o cambiar sus reglas de operación, recordó que tras el paso de "Ingrid" y "Manuel", el puerto de Acapulco se levantó con recursos del Fonden.
Consideró prudente que la Conferencia Nacional de gobernadores (Conago) haga un planteamiento al gobierno federal y si el Fonden ya no existiera como tal, habrá que buscar una nueva figura para ayudar a los estados afectados por fenómenos naturales.
Añadió que entiende que el país está atravesando por una situación económica muy complicada y que se tienen que buscar recursos de donde haya, pero que espera que haya claridad cuando se requiera apoyar a los estados, y puso como ejemplo el estado de Quintana Roo, donde no se reportan muertos ni heridos, pero seguramente los sistemas de drenaje y agua potable deben estar colapsados y requerirán rehabilitarse.
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