Ante la proximidad de las fiestas guadalupanas, posadas, festejos navideños y de fin de año, los Obispos de la Iglesia Católica en acuerdo con el gobierno de Guerrero emitieron un decálogo de recomendaciones para evitar aglomeraciones y disminuir la movilidad de personas para prevenir riesgos de contagio de COVID-19.
En ese sentido, llamaron a los fieles católicos y a la población en general poner gran cuidado en evitar aglomeraciones y seguir respetando las medidas sanitarias.
Indicaron que en las celebraciones litúrgicas y devocionales en el templo permitirá una capacidad de 40 por ciento, distancia de dos metros entre las personas, todos deberán usar cubrebocas, al entrar recibirán gel antibacterial y deberán pisar el tapete sanitizador.
Suspender las tradicionales “antorchas guadalupanas”, las serenatas o mañanitas multitudinarias, los festejos en barrios o en casas, en talleres o empresas.
En los días del docenario pueden programarse recorridos de la imagen de la Virgen de Guadalupe por las calles de los barrios y colonias, pero sin procesión, a los barrios se les pidió evitar las tradicionales mañanitas a la Virgen y su convivencia festiva.
En el documento señalan que, en los santuarios y templos de mayor devoción a la Virgen de Guadalupe, el día 12 desde la hora en que se mire prudente se suspenda la celebración de la Misa y se organice el paso de los fieles frente a la imagen de la Virgen, de manera ordenada y con sana distancia.
Asimismo, que en la novena de posadas hagan lo posible por organizarlas en cada familia y se eviten aglomeraciones en las iglesias, mientras que las celebraciones navideñas en los templos se realizarán con las debidas medidas sanitarias con un aforo al 40 por ciento.
Pidieron exhortar a todos los miembros de su familia, particularmente a los jóvenes, a vivir con responsabilidad las fiestas navideñas y de fin de año, a fin de evitar la propagación de este virus.
El documento está firmado por Leopoldo González González, arzobispo de la Arquidiócesis de Acapulco; Salvador Rangel Mendoza, obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa; Dagoberto Sosa Arriaga, obispo de la Diócesis de Tlapa; Joel Ocampo Gorostieta, obispo de la Diócesis de Ciudad Altamirano y Armando Antonio Ortiz Aguirre, obispo de la Diócesis de Ciudad Lázaro Cárdenas, Michoacán.
