El secretario de Salud de Puebla, Antonio Martínez García, informó que se registraron otros dos casos sospechosos de hepatitis aguda infantil más en la entidad, por lo que ya son tres los que se vigilan en el estado.
En conferencia de prensa, afirmó que las muestras ya fueron enviadas al Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológico (InDRE) para que sean analizadas y se determine si corresponden a esta enfermedad, que ya se descartó tenga que ver con la vacuna del COVID-19.
“Aún el InDRE no nos manda el resultado, ya se sesionó en un órgano colegiado y aparentemente no coincide el cuadro clínico de la hepatitis aguda grave con el comportamiento de la paciente, aparentemente fue más de función hepática que hizo que la glándula se agrandara”, señaló Antonio Martínez.
El pasado 20 de mayo, la dependencia reportó un caso sospechoso de hepatitis infantil aguda en una menor de dos años, la cual dijo que ya se encuentra completamente asintomática y “libre de la enfermedad hepática”.
Martínez García especificó que la hepatitis es una inflamación del hígado, pero se le llama aguda cuando este fenómeno ocurre de manera “abrupta” que se manifiesta, por coloración amarillenta de la piel.
De acuerdo con el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a nivel mundial hay más de 650 casos de hepatitis aguda infantil en 33 países, además, nueve niños fallecieron por la enfermedad y 38 necesitaron un trasplante de hígado.
Indicó que un 58 por ciento de los casos se han diagnosticado en Europa, de los que el Reino Unido, que fue el primero que reportó esta enfermedad, el 5 de abril, es el país con más contagios confirmados, 222; seguido de Estados Unidos con 216; Japón, 31; España, 27; e Italia con 21.
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