Violencia en Sinaloa pega a Mazatlán con 3 ejecuciones

La ola de violencia en Sinaloa, que durante 22 días se había concentrado prácticamente en Culiacán, en el municipio colindante de Elota y en la zona serrana de Concordia, alcanzó este martes al puerto turístico de Mazatlán, en donde un negocio de maquinitas fue atacado por hombres armados, quienes ejecutaron a dos personas que se encontraban ahí e incendiaron el local.

Testigos relataron que los sicarios llegaron al lugar, dispararon contra quienes se encontraban adentro y le prendieron fuego a la accesoria. Las dos víctimas perdieron la vida debido a los impactos de bala que recibieron en diversas partes del cuerpo, en este evento que generó pánico entre los habitantes de la zona.

Al negocio, ubicado en la calle Principal o del Rastro de la colonia Rafael Buelna, llegaron elementos de la Policía Estatal y de la de Investigación, así como elementos del Cuerpo de Bomberos y paramédicos, los cuales verificaron que las personas baleadas ya no presentaban signos vitales.

Horas antes, un varón de aproximadamente 35 años de edad e identificado como Cristian “V” fue asesinado de al menos ocho balazos en el abdomen y en la cabeza, en calles de la populosa colonia Benito Juárez.

Además, durante la madrugada, una casa ubicada en la zona centro del puerto se incendió hasta quedar completamente calcinada, con un vehículo adentro. Aunque las autoridades no precisaron las causas del siniestro, extraoficialmente se informó que se trató de un ataque perpetrado por integrantes del crimen organizado.

Mazatlán había sido elegido como lugar de refugio por decenas de familias de al menos cinco comunidades de la sierra de Concordia que dejaron sus casas por las amenazas de miembros del crimen organizado, por considerar que era un lugar tranquilo y seguro. Pero la violencia ya llegó a sus calles.

De acuerdo con reportes de medios locales, los pobladores de este destino turístico han empezado a resguardarse temprano, por lo que los centros comerciales y los lugares de diversión se ven vacíos por la tarde y por la noche.

Ayer, la Red Ciudadana Anticorrupción de Sinaloa, que agrupa a decenas de organizaciones de la sociedad civil, hizo un llamado a los tres niveles de Gobierno para que se restablezcan la paz y el orden público en la entidad.

En un desplegado dirigido a la Presidenta Claudia Sheinbaum, a los nuevos titulares de la Sedena y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, al gobernador Rubén Rocha y a los presidentes municipales de la entidad, la Red pidió que “juntos, con todas sus atribuciones hagan su trabajo, que es brindar esta protección a la ciudadanía”.

“No exageramos cuando decimos que en los últimos veintidós días hemos observado con terror un incremento en las actividades delictivas, como son los asesinatos, desapariciones, balaceras, bloqueo de vialidades y robo de vehículos, lo cual ha generado incertidumbre, aislamiento y efectos devastadores en la sociedad. La vida cotidiana se ha trastocado y nada nos garantiza que esta situación terminará pronto”, dice el desplegado.

Crece desabasto

En tanto, autoridades de Sinaloa reconocieron que el desabasto de alimentos y mercancías se ha intensificado en al menos cuatro comunidades de dos municipios.

María Inés Pérez Corral, titular de la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Sustentable, señaló que las localidades de La Raza, El Palmito Rosal y La Rata, del municipio de Rosario, y El Palmito, del municipio de Concordia, están en situación crítica por este fenómeno.

La funcionaria informó que elaborará una estrategia con la paraestatal Liconsa para atender a las comunidades rurales y serranas de los cuatro municipios de Sinaloa más afectados por la violencia.

“Ya estamos platicando con Liconsa; nos van a hacer una ruta para darle seguimiento; nosotros, desde acá les pedimos a cuatro municipios que nos pasen una lista de comunidades afectadas”, dijo.