Una forma de protegerte a ti y a tu familia es con un seguro médico, ya que ayuda a enfrentar problemas de salud inesperados y situaciones más graves como accidentes.
Es importante contar con este producto financiero porque en cualquier época del año se pueden presentar incidentes, además de que uno de los mayores gastos que realiza la población mexicana radica en consultas y un seguro es una gran ayuda para poder cubrir los costos médicos, que en su mayoría, son bastante elevados.
Cuando se contrata este servicio con una empresa aseguradora se paga una cantidad mensual, semestral o anual a cambio de ayuda para cubrir servicios y productos que tienen el objetivo de prevenir alguna enfermedad con chequeos y diversos estudios, además de apoyar en una emergencia.
Son muy apreciados por quienes desean evitar listas de espera para pruebas diagnósticas, asistencia hospitalaria, servicios quirúrgicos, entre otros.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), solamente existen dos tipos de pólizas, las de salud y las de gastos médicos mayores.
El primero brinda apoyo financiero para el monitoreo y prevención de la salud; por ejemplo, el pago de consultas médicas, exámenes clínicos, laboratorios, orientación médica a distancia, incluso terapias y servicios limitados de ambulancia.
Mientras que el de gastos médicos mayores brinda soporte financiero para la atención médica de un accidente, enfermedad o urgencia médica. Éste no busca dar con el diagnóstico, a diferencia del primero, sino que opera a partir de que se cuenta con el diagnóstico de una enfermedad o una situación de emergencia para tratarla o atenderla.
El seguro se puede contratar de forma individual o familiar, éste último es el más solicitado, ya que garantiza atención en una única póliza para toda la unidad familiar.
El precio de cada producto financiero varía dependiendo de la cobertura; por ejemplo, algunos incluyen medicamentos, otros no; algunos cubren estudios al 100 por ciento, otros sólo un porcentaje; algunos la totalidad del costo de consultas y otros ofrecen precios fijos preferenciales. Esto permite que el pago de algunas opciones de seguro de salud sea más económico y accesible que otros al no absorber la totalidad de los costos.
Aunque el seguro de salud y el de gastos médicos mayores son distintos, no se contraponen, incluso la AMIS recomienda contar con ambos para tener una mayor protección integral para la familia.
BBVA cuenta con el producto financiero llamado “Seguro tu médico particular” en el que estipula que se puede elegir al doctor de preferencia a nivel nacional; recibir consultas ilimitadas en casa; incluye cobertura en medicamentos y estudios de diagnóstico; también se puede acudir a cualquier hospital en caso de alguna urgencia médica y reembolsa hasta siete mil 500 pesos.
La contratación es cien por ciento digital y se puede asegurar personas desde 0 hasta 74 años de edad; sin embargo, el que contrata este producto debe ser mayor de 18 y el pago del seguro puede ser deducible de impuestos.
“Sólo recuerda que no tienes que estar enfermo para cuidar tu salud, ya que existe este tipo de seguro —de salud— que te permite prevenir enfermedades. No tienes que esperar a que te pase algo y darte cuenta de que debiste contratarlo con anticipación”, señaló la institución.
En México, la contratación de pólizas de gastos médicos ha aumentado en los últimos 10 años, de acuerdo con las últimas cifras de la AMIS.