Mate, empanadas, tango, vino y futbol son sinónimo de Argentina, segundo país más grande de Sudamérica y el octavo más extenso del mundo, con más de dos millones 780 mil kilómetros cuadrados. La cultura y la historia de esta nación, junto a una diversidad de climas, hacen posible disfrutar de unas vacaciones inolvidables en cualquiera de sus provincias, pues cada una tiene atractivos que dejan maravillados a los turistas que las visitan.
Por su tamaño, limita con Chile al oeste, con Bolivia y Paraguay al norte, con Brasil al noreste y con Uruguay. Si bien la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es de los destinos más populares por su hermosa arquitectura, Argentina cuenta con una diversidad de paisajes naturales y climas que abarcan desde llanuras húmedas, desiertos, altas montañas y temperaturas tropicales del norte, hasta las nevadas y fríos extremos en la cordillera y el sur, lo que ofrece una amplia gama de actividades y lugares por recorrer.
La mezcla de culturas indígenas con la colonia española y las migraciones, como la italiana, hace que esta riqueza se refleje en la música, con géneros como la chacarera, la zamba, el chamamé, el tango, y en la danza, con el malambo, la cueca o el gato. También la gastronomía refleja la diversidad con pastas hechas a mano, quesos, carnes de alta calidad para el asado, la cazuela norteña, empanadas con todo tipo de rellenos y milanesas. Para paladares que disfrutan de suaves sabores está el delicioso dulce de leche, las medialunas, los alfajores o las facturas acompañadas de un mate para el desayuno o la merienda.
Córdoba
Es la ciudad más grande de Argentina y la segunda más poblada después de Buenos Aires, además de ser un importante centro cultural. Se sitúa en la región central a orillas del río Suquía o Primero y también es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En ella se encuentra la Manzana Jesuítica, ubicada en el centro, integrada por la Universidad Nacional de Córdoba, el colegio Monserrat y el templo de la Compañía de Jesús. No dejes de ir a la Catedral, al Cabildo y la Plazoleta del fundador. Te sorprenderán.
Mendoza
Ubicada en la llanura al este de la cordillera de los Andes, esta ciudad es reconocida por la calidad de sus vinos, por lo que puedes recorrer los viñedos y bodegas, así como cabalgar como todo un gaucho. Asimismo, es posible caminar por el Parque San Martín o la Plaza Independencia y comprar mermeladas, aceite de oliva o comer una buena pizza, una parrillada o un chivito en el Mercado Central, donde a menudo hay música en vivo.
Purmamarca
La población norteña de la provincia de Jujuy es uno de los pueblos que forman la Quebrada de Humahuaca, un territorio montañoso nombrado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2003. Puedes apreciar el Cerro de los 7 Colores desde las antiguas calles de la comunidad o desde el mirador del Cerro del Porito y comprar artesanías, como mantas de pelo de alpaca, degustar una cazuela de llama o visitar la Iglesia Santa Rosa de Lima.
Ushuaia
A esta ciudad siempre hay que llevar un buen abrigo, pues en invierno las temperaturas no superan los 5 grados. Algunas atracciones son el Parque Nacional Tierra del Fuego y sus glaciares, viajar en el Tren del Fin del Mundo, de principios del siglo XX, o hacer una excursión y practicar trekking, navegación, mountainbike y esquí. Si navegas por el canal Beagle para ver el faro Les Éclaireurs puedes observar alguna colonia de lobos marinos.
Bariloche
Por las bajas temperaturas de la Patagonia argentina, lo más recomendable es visitarla en primavera u otoño, pero el invierno es ideal para los amantes del frío y la nieve. Puedes salir de fiesta a alguna discoteca o bar, cabalgar por la estepa, dar un paseo por la Colonia Suiza o practicar ski y snowboard. Otra opción es pasear por el Lago Mascardi o el Lago Gutiérrez.
Buenos Aires
Puedes recorrer la capital del país y admirar la Casa Rosada, la Catedral Metropolitana, el Obelisco y caminar sobre la avenida 9 de Julio, una de las más anchas del mundo. O tomarte una foto en la colorida calle de Caminito del Barrio de La Boca, que se encuentra a 400 metros de La Bombonera, el estadio de Boca Juniors, para terminar con un show de tango porteño en el Teatro Ástor Piazzolla o algún recital en el Luna Park.