Las tendencias no sólo llegan a la moda, la belleza o al interiorismo, sino que cada año también hay nuevas propuestas fitness, para tener una buena salud y bienestar. Con el 2025 a la vuelta de la esquina, el panorama del ejercicio físico promete transformarse con la combinación de técnicas y también con el uso de la tecnología.
Algunas de las principales tendencias que marcarán el camino hacia un estilo de vida más saludable, conectado y adaptado a las necesidades individuales, son el hot pilates, el yoguilates, el entrenamiento funcional, la Inteligencia Artificial y la realidad virtual en programas de entrenamiento, entre otras.
El hot pilates es una modalidad de ejercicio que combina los principios de esta práctica con un ambiente de calor intenso parar mejorar la flexibilidad, la fuerza, la postura y la tonificación muscular. La actividad se realiza en una zona cálida con calefacción a temperaturas entre 35 y 40 grados centígrados, para que el cuerpo sude más durante el ejercicio. Esto puede ayudar a mejorar la circulación, a desintoxicar el cuerpo a través del sudor y a incrementar la flexibilidad de los músculos, aumentar la quema de calorías y mejorar el rendimiento durante el entrenamiento.
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Las sesiones duran entre 40 y 60 minutos y se hacen movimientos de bajo impacto que trabajan principalmente la fuerza de la zona abdominal, lumbares y glúteos, la flexibilidad y la postura. Las clases suelen incluir ejercicios de tonificación que se llevan a cabo en colchonetas, y a veces con accesorios como pelotas pequeñas, bandas elásticas o pesas ligeras.
Otra de las tendencias de ejercicio para el 2025 es el yoguilates, el cual combina las posturas clásicas con la estabilización corporal del pilates.
Las clases suelen ser suaves y centradas en la respiración. Los movimientos son fluidos y continuos, lo que ayuda a mantener una práctica armoniosa que conecta el cuerpo y la mente.
Con esta combinación de ambas disciplinas se busca mejorar tanto la fuerza muscular como la flexibilidad de manera equilibrada, también permite reducir el estrés y la ansiedad al promover la calma mental. Contribuye a mejorar la postura y tonificar y activar el abdomen.
Este 2025 el entrenamiento funcional será uno de los más destacados, ya que se trata de ejercicios similares a los de la vida cotidiana, como cargar cosas, para moverse de forma eficiente y prevenir lesiones a lo largo del tiempo.
Los entrenamientos con peso corporal, el levantamiento de pesas y el entrenamiento en suspensión, están diseñados para potenciar el bienestar a largo plazo, mejoran la fuerza, flexibilidad y equilibrio, por ejemplo.
Si bien, desde la pandemia se han usado aplicaciones para hacer ejercicio en casa, se espera que el 2025 sea el año en el que la tecnología tenga un papel destacado en la vida fitness, ya que los programas de entrenamiento basados en Inteligencia Artificial podrán realizar planes personalizados, según los datos biométricos de cada usuario, y podrán ajustar automáticamente la intensidad, la duración y los ejercicios de acuerdo con el rendimiento y las necesidades
de cada persona.
Asimismo, la realidad virtual también será parte de la actividad física de la gente que quiere mejorar su calidad de vida, ya que permitirá entrenar de manera más dinámica manteniendo el cuerpo y la mente en constante desafío. Se puede correr por paisajes virtuales o entrenar en clases interactivas en 3D.
