Una de las metas y sueños más importantes para los seres humanos es contar con su propio hogar, en esta Navidad y Año Nuevo de seguro el adquirir una vivienda fue de los deseos más recurrentes; sin embargo, diversos factores pueden desincentivar estos anhelos.
No es para menos, actualmente los jóvenes, quienes están más proclives a buscar opciones de vivienda, se enfrentan a propiedades con costos exhorbitantes; no obstante, no todo es tan malo, existen opciones que pueden ayudarte a paliar estos obstáculos para que te puedas hacer de tu propio espacio.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), existen algunos mecanismos que pueden facilitarte la adquisición de una casa, tal es el caso de los cocréditos o créditos mancomunados, los cuales te permiten sumar tus ingresos con los de algún amigo para que puedan acceder a una hipoteca mayor y facilitar el acceso a una propiedad que, de otra manera, podría estar fuera de tu alcance. Pero primero, es importante que busquen y comparen antes de elegir alguna de las opciones.
Este es el rímel mexicano que usó Jeffree Star ¿Cuánto costaba antes y cuánto cuesta actualmente?
¿Qué es un crédito hipotecario? De acuerdo con la Condusef, un crédito hipotecario es un préstamo otorgado por instituciones financieras, con el fin de que una persona pueda financiar la compra, construcción o remodelación de un inmueble, en caso de no contar con recursos propios al momento de la compra. Se caracteriza por ser un financiamiento a largo plazo (de 5 a 30 años), y la propiedad debe quedar como garantía de pago y aunque representa una gran opción para adquirir una vivienda, los requisitos suelen ser difíciles de cumplir para muchos. Por ello, aquí te dejamos una guía para que explores esta opción.
¿Cómo funciona el esquema de coacréditado? Las instituciones financieras han buscado la manera de incluir a más personas en este tipo de opciones, por lo que han creado productos más accesibles para que las personas puedan comprar una casa. Una de estas opciones es la modalidad de hipoteca a través de la figura del coacreditado. Un coacreditado es una persona que, como obligado solidario, adquiere las mismas responsabilidades y derechos que el acreditado, tanto sobre la propiedad como en la deuda. Una de las principales características de este esquema es que permite solicitar un crédito hipotecario con dos o más personas, que no necesariamente tengan un vínculo sanguíneo o legal, como tus amistades, con el fin de sumar ingresos y aumentar la posibilidad de obtener un préstamo mayor.
Ventajas…
Es más sencillo: a través de éste pueden obtener un mayor monto, así como tasas de interés más bajas o plazos más favorables.
Comprar una mejor casa: al sumar sus ingresos y dividir costos, pueden encontrar una vivienda con mejores espacios, mejor ubicación e incluso amueblada.
Compartir todos los gastos: considera que no sólo podrán dividir los pagos de la hipoteca, sino también los de mantenimiento, servicios, monto notarial y demás.
Desventajas…
Confianza: éste es un compromiso financiero a largo plazo, por lo que se debe revisar a detalle las implicaciones adquiridas, además de tener los mismos planes a futuro.
Venta conjunta: si por alguna razón deciden vender la propiedad, las ganancias se dividirán según lo acordado previamente, por ello se debe establecer desde el principio.
Implicaciones financieras: los comportamientos negativos afectarán a las y los involucrados por igual, por ejemplo, si alguien incumple en el pago afectará el historial crediticio de los dos.
Requisitos…
Si tú y tu amigo o amiga ya decidieron utilizar este esquema, aquí hay algunos requisitos que deben cumplir, aunque estos varían según la institución financiera.
Tanto el titular del crédito como el coacreditado deberán aprobar la evaluación crediticia, donde se revisará su historial crediticio y puntaje, así como su capacidad de pago.
La suma de los ingresos combinados deberá cubrir las mensualidades de la hipoteca.
Proporcionar la documentación solicitada, como: identificación personal, comprobante de domicilio, documentos financieros, comprobantes de ingresos, etc.
Para dar certeza legal, el coacreditado también deberá firmar el contrato de la hipoteca, para así demostrar su compromiso financiero y conocer sus derechos adquiridos.
Esta guía rápida la realizó la Condusef, por lo que puedes acercarte a ellos en caso de alguna duda; no obstante, siempre será mejor que acudas a la institución financiera de tu elección y optes por el crédito que se ajuste mejor a tus necesidades .
Es recomendable preguntar sobre las diferentes opciones de créditos disponibles, las tasas de interés que ofrecen, los plazos y requisitos específicos y sobre todo, es muy importante que tu y tu compañero lean cuidadosamente los términos y condiciones.
