Llevar la naturaleza al interior de la casa es uno de los principales retos de las corrientes de interiorismo, ya que buscan replicar el ambiente agradable, cálido, acogedor y relajado que ésta ofrece y aplicarlo hacia todos los espacios del hogar.
En ese sentido, una de las formas de decoración que más están ganando terreno es la del estilo orgánico-moderno, que cuenta con elementos que ayudan a incrementar esa conexión con lo natural en tu hogar.
Para aplicar este modelo de interiorismo, los colores son clave para después colocar muebles, accesorios y por supuesto las plantas. Por ello, los especialistas recomiendan optar por colores neutros que ayudan a mantener un estado un ambiente de serenidad y un ánimo equilibrado.
Aunque los colores neutros más populares son blanco y beige también se puede jugar con otros tonos terrosos, el marrón y el verde, con los que se sigue manteniendo la esencia de naturaleza.
Para continuar con la decoración se sugiere optar por muebles o accesorios de materiales orgánicos, por ejemplo, elegir muebles de madera, de bambú o de corcho son excelentes opciones, aunque también se pueden colocar sillones de piel, que también son piezas naturales. Se recomienda que las piezas no tengan ningún tratamiento para mostrar las imperfecciones, las líneas, la rugosidad o la ligereza y que estos elementos sean los verdaderos protagonistas.
Otra premisa del estilo orgánico-moderno es exponer los elementos más geniosos de la vivienda, es decir, que apuesta por mostrar todo natural, por lo que se pueden dejar algunas paredes descubiertas; o sea, que se vean los ladrillos que normalmente se ocultan bajo las paredes de yeso, esto para un efecto más rústico.
La piedra es otro material que encaja con este estilo, ya que también hace alusión a la naturaleza, entonces se puede optar por muebles o accesorios decorativos como fuentes de agua que se colocan al interior de la casa, pequeñas esculturas o incluso bandejas o utensilios de cocina.
Asimismo, el interiorismo orgánico también apuesta por la funcionalidad; es decir, seleccionar piezas que tengan una utilidad y no que sólo se coloquen en la casa como elementos meramente decorativos.
Por otra parte, las plantas son básicos que no deben faltar en esta forma de decoración, ya que es la manera más evidente en la que se puede llevar la naturaleza al hogar.
Se deben elegir aquellas que se adapten a las condiciones de la casa, si es un lugar donde hay mucha luz, seleccionar plantas de sol, si la iluminación es limitada, entonces hay que optar por las que sean de sombra.
También hay que evaluar factores como la humedad, la circulación de aire, ya que todo ello impactará en el bienestar de las plantas. Hay que recordar que hay algunas que requieren de tratamientos especiales, por ejemplo, las orquídeas necesitan de una vitamina especial para que se mantengan sanas y con la mayor cantidad de flores posibles.
Los elementos orgánicos naturales se pueden aplicar en cualquier parte del hogar; sin embargo, un espacio en el que se pueden aprovechar mejor es el baño, en donde es posible incluir materiales como la piedra y la cerámica para hacer de este lugar un sitio más tranquilo y de mayor relajación que el resto de la vivienda.