México es un mercado estratégico en los planes de negocio de Nissan, la armadora líder en ventas a nivel nacional. Con los modelos Versa, March y NP300, entre otros, la empresa tiene en su poder 20 por ciento del mercado local.
“Llegamos para quedarnos, hemos estado aquí más de 60 años y queremos estar 60 más, hemos logrado tener el liderazgo (en ventas) por 15 años y queremos tenerlo por otros 15 más”, comenta a La Razón Rodrigo Centeno, quien el 1 de julio asumió la presidencia y dirección general de Nissan Mexicana.
Para la compañía de origen nipón, México es la cuarta economía más importante en ventas y una de las más emblemáticas en su historia. Con el objetivo de afianzar su presencia en el territorio nacional, desarrolla una inversión de 700 millones de dólares, con la cual reconfigura su planta productiva y mejora la capacitación de su personal.
¿Cuál es la importancia del país en su estrategia de negocio? Tenemos más de 60 años aquí. La primera inversión de Nissan a nivel manufactura fuera de Japón fue en México, la planta Civac de Cuernavaca, eso habla de la relevancia que tiene la nación para la compañía, la cual no es nueva, tiene muchos años.
Llegamos para quedarnos, hemos estado aquí más de 60 años y queremos estar 60 másRodrigo Centeno, Presidente y director general de Nissan Mexicana
Esta relación no sólo es manufactura, también en ingeniería y en desarrollo de talento. En Toluca tenemos un centro de ingeniería con integración global donde se desarrolla todo lo que está detrás de los vehículos que se producen en el país.
En la perspectiva comercial, es el séptimo país a nivel global por tamaño de industria, pero si lo pones en perspectiva, es el cuarto mercado más importante en la venta de vehículos, después de China, Estados Unidos y Japón. “En ese sentido, somos superimportantes y superrelevantes para la organización”.
¿Cuál es el tamaño de la empresa en México? Tenemos tres plantas de manufactura: Aguascalientes 1, Aguascalientes 2 y Civac. También contamos con el centro de ingeniería, laboratorios de pruebas en Manzanillo, centros de capacitación a nivel nacional y el corporativo en la Ciudad de México. Hay 16 mil familias que, de manera directa, comemos y llevamos el pan a nuestras mesas. Si consideras la cadena de distribución, que son 231 puntos de venta, se suman 50 mil más y, si le añades la cadena de proveeduría, son 100 mil hogares adicionales que tienen una relación cercana con la marca.
Con este equipo y mano de obra se producen cerca de 600 mil vehículos al año. Además, por 15 años, hemos mantenido el liderazgo en ventas, con 20 por ciento de participación del mercado. Ello implica que uno de cada cinco autos que se comercializan es de Nissan.
La empresa sigue comprometida con las inversiones. Recientemente se anunció la inyección de capital por 700 millones de dólares, que está pensada en la reconfiguración de la planta productiva para hacerla más eficiente y a la capacitación y desarrollo de nuestra gente.
“Eso es lo que importa, no sólo se trata de venir a vender autos, se trata de comprometerse con el país, de generar un vínculo cercano, permanente, con la gente y es uno de los puntos más relevantes y fuertes como empresa. A mí me gusta decir que Nissan es la marca de autos mexicana más japonesa, porque el nivel de sinergia que tiene con el país es superprofundo y por eso le apostamos y le seguiremos apostando a México”.
¿Cómo avanza la industria automotriz? Vemos un mercado que se está consolidando, regresando a niveles de demanda y capacidad de oferta de prepandemia. Venimos de tres años y medio, casi cuatro, bastante atípicos, donde la industria estaba en el orden de 1.2 millones de vehículos vendidos al año, por allá del 2019. Lo que estamos identificando es que la demanda del consumidor final y de negocios está regresando a esos niveles.
Nosotros medimos por año fiscal, así es que arrancamos de abril hasta marzo, empezamos a ver un poco la mayor disponibilidad de vehículos a partir de enero de este año y un repunte importante a partir de marzo que se ha ido consolidando en abril, mayo y junio. Como industria vamos a estar un poco arriba de 1.2 millones de unidades, lo cual es superpositivo.
Sin embargo, del 2019 al 2023, los precios de los autos, en general, han aumentado entre 35 y 40 por ciento, que no es cifra menor, al tiempo que las tasas de interés también están elevadas; en el caso del Banco de México aumentaron de 4.75 a 11.25 por ciento.
Ante este suceso económico, contamos con una ventaja competitiva importante con la financiera Credi Nissan, que nos permite, en buena medida, atemperar esos impactos de tasa y de precio frente al consumidor y mantener los mismos niveles de enganche y mensualidad que teníamos en el 2019 en favor de los mexicanos.
En cuanto al fenómeno de la relocalización de las cadenas globales, el llamado nearshoring, nos va a permitir fortalecer la consolidación que ya tenemos en el mercado nacional como una de las armadoras líderes.