Tras dos años de investigación, el equipo de la Dirección del Parque Nacional Galápagos del Ministerio del Ambiente y Agua, determinó que la tortuga encontrada en 2019 en la Isla Fernandina de Ecuador fue compatible con las muestras de ADN de un ejemplar de 1906. Los investigadores creen que aún se pueden encontrar más especies de Chelonoidis phantasticus, por lo que se planea una próxima expedición en la Isla Fernandina.