El polo de la Tierra es el punto donde el eje de rotación cruza su corteza en el hemisferio norte; éste se desplaza en una nueva dirección hacia el este desde la década de 1990, según observaciones geodésicas espaciales; la comunidad científica cree que la causa son los cambios en la hidrosfera, la atmósfera, los océanos e incluso la tierra sólida. Un nuevo estudio cuantifica la contribución de los cambios en el almacenamiento de agua terrestre comparando su trayectoria de deriva en dos escenarios diferentes, uno que asume que el cambio en el almacenamiento de agua terrestre a lo largo de todo el período de estudio (1981-2020) es similar al observado recientemente (2002-2020) y el otro reporta que cambió debido al derretimiento observado del hielo de los glaciares; este último junto con la atmósfera, los océanos y la tierra sólida, concuerda con el movimiento polar durante el período 1981-2020, y la disminución acelerada del almacenamiento de agua terrestre como resultado del derretimiento del hielo glacial.