Por Jardiel Palomec
La ausencia del ministro José de Jesús Gudiño Pelayo durante la sesión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) provocó que el máximo tribunal del país aplazara la discusión de la sentencia que anularía la condena de otros 26 indígenas acusados de participar en la matanza de Acteal, Chiapas, ocurrida en diciembre de 1997.
En su sesión, los ministros de la Primera Sala de la Corte explicaron que los expedientes que contienen el caso quedaron en lista para resolverse la próxima semana.
En teoría, la Sala podía haber votado ayer el caso, pues tiene quórum con cuatro integrantes y está claro el criterio mayoritario en favor de otorgar los amparos, pero la decisión fue que todos los integrantes de la Sala estén presentes a la hora de resolver este caso.
Los cuatro ministros de la mayoría argumentan que los fundamentos de la acusación de la PGR descansan en pruebas obtenidas ilícitamente por el Ministerio Público y avaladas de manera indebida por un juez de distrito y por un magistrado de circuito.
La ausencia del ministro Gudiño Pelayo se debe a que se encuentra de comisión en Campeche, por lo que los ministros decidieron esperar su regreso a la sala, ya que hay puntos que todavía deben ser deliberados.
El pasado 12 de agosto, la SCJN resolvió otros tres amparos relacionados con la matanza de 45 personas, en los que ordenó la libertad inmediata de 20 acusados y el dictado de nuevas sentencias en otros seis casos.
En esa sesión fue rechazado por cuatro votos contra uno un proyecto del ministro Sergio Valls que negaba el amparo a 26 acusados adicionales.
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