Notimex
Ciudad del Vaticano.- El abstencionismo en las elecciones es pecado coincidieron en afirmar los arzobispos mexicanos de Chihuahua, Constancio Miranda Weckmann, y de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, quienes llamaron a los ciudadanos a votar.
En entrevistas por separado con Notimex y a unas horas de los procesos electorales para elegir autoridades en varios estados de la República Mexicana este 4 de julio, los prelados instaron a los católicos a cumplir con su deber ciudadano y ejercer su sufragio.
“Sí, es pecado de negligencia, pecado de omisión; nuestra intención es animar a que sí ejerzan su voto, que voten por la opción que crean mejor en beneficio de la sociedad”, afirmó MirandaWeckman.
“Nuestro llamado es a invitar a todos a ir a la urnas, que no nos abstengamos de votar y lo hagamos de una manera razonada, responsable y contribuiremos así a crear una mejor sociedad”, apuntó.
El arzobispo chihuahuense auguró que tras los comicios se imponga la concordia, gracias a la contribución de todos en la elección de quienes gobiernen sus destinos pero también en la colaboración en todos los frentes, porque la democracia no se hace sola.
Por su parte Carlos Garfias Merlos, arzobispo de Acapulco, calificó también como un pecado la llamada “guerra sucia” de descalificación entre los diversos partidos porque “el mentir y el engañar son faltas que aparecen claramente” en las campañas.
“Lo que debemos procurar es que haya sinceridad, verdad y que se busque siempre el bien de la sociedad, el bien colectivo antes que los intereses particulares”, indicó.
Por eso hizo un llamado a la responsabilidad y a la participación ciudadana, ya que en la medida que cada quien, con toda conciencia y libertad, participe en los periodos de elección y colabore en forma responsable con las autoridades será posible transformar la sociedad.
Calificó el votar como una responsabilidad social, una exigencia de todos los ciudadanos para participar en las votaciones y en todos los momentos importantes dentro del ambiente de la política y la ciudadanía.
“La realidad nos está pidiendo compromiso y responsabilidad social”, sentenció.