La tragedia en Oaxaca no ha sido indiferente para la población. De todos lados llega ayuda: desde grupos de vecinos locales, otros que han recorrido hasta casi dos horas para poder ayudar, e incluso organizaciones como el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del municipio Nezahualcóyotl, en el Estado de México, que envió personal y apoyos para Juchitán.
“Nosotros somos un municipio que está conformado con más del 60 por ciento que tiene orígenes o raíces oaxaqueñas; entonces es bien importante para nosotros el poder colaborar con nuestros hermanos oaxaqueños cuando sucede una desgracia, no sólo por ser oaxaqueños, sino xpor humanidad”, señaló Carmen de la Rosa Mendoza, presidenta del organismo.
“Definitivamente el municipio depende del gobierno estatal y federal para salir adelante, solos no podremos, porque no tenemos los recursos”. Gloria Sánchez, Alcaldesa de Juchitán
Junto con médicos para ofrecer consultas y medicinas, así como un grupo de 30 integrantes del DIF municipal, una ambulancia, carpas y equipo para instalar los módulos, los de Neza trajeron a Juchitán mil despensas para llevar a las comunidades más alejadas de la cabecera municipal.
El Dato: Las Fuerzas Armadas ya repartieron 6 mil despensas para los damnificados en Juchitán, un promedio de dos mil por día, en las zonas más afectadas.
La población nezatlense ya donó ayuda para tres municipios de Oaxaca. Ayer preparaba un nuevo camión con víveres donados por la población para ser trasladados al Istmo oaxaqueño.
El legislador local, Samuel Gurrión, también gestionó recursos con empresas como la mezcalera Los Amantes y la marca de ropa Furor para llevar apoyos alimentarios a la población afectada.
[caption id="attachment_491068" align="alignleft" width="300"] Algunos vecinos también llevan comida caliente para repartir.[/caption]
“Hay casas que no se cayeron y no se perdieron, pero no hay alimentos, no hay agua ni medicamentos, y es un ambiente de tristeza, de desolación que están sufriendo. Es una responsabilidad de todos, no sólo de los que hacemos política: de empresarios, profesionistas, todos los que podemos aportar debemos hacerlo”, señaló el legislador.
Por las calles de la octava sección, una camioneta con comida recorrió las calles para llevar ayuda a los damnificados. Los alimentos no vinieron de alguna autoridad, sino de 400 personas de la comunidad de Santa María Guienagati, que está a más de hora y media de distancia de Juchitán.
La población se unió para poder aportar recursos o preparar café, arroz, tamales, atoles y té para unos 400 juchitecos.
“Somos de un pueblo zapoteca donde la gente también es de bajos recursos, pero fue asombroso ver cómo al hacer la invitación la gente iba y daba un kilo de arroz, frijoles o más comida”, señaló Amparo, una ciudadana de esta región.
“Ayuda será la que nos saque adelante”
Para la presidenta municipal de Juchitán, Oaxaca, Gloria Sánchez, únicamente la ayuda de los gobiernos estatal y federal harán que salga adelante la población; sin embargo, confió en que la ayuda que anunció la federación les permitirá atravesar .
“Desgraciadamente estamos pasando el momento más complicado. Definitivamente el municipio depende del gobierno estatal y federal para salir adelante, solos no podremos, porque no tenemos los recursos. Hace un par de días estuvo el Presidente y dio su palabra de que se va a reconstruir”, indicó en entrevista con La Razón.
La edil sostuvo que éste es el peor momento de la historia de Juchitán, pero dijo que los juchitecos son valientes y estarán de pie.
Juchitán se convirtió en una de las zonas más devastadas por el sismo del jueves pasado, con un saldo preliminar de 36 personas fallecidas y la estimación de cinco mil casas con afectaciones y por lo menos mil derrumbadas.
Néstor Jiménez