Aplicar descuentos y despidos a maestros que se niegan a impartir clases en los planteles que ya cuentan con el dictamen de seguridad estructural, es lo que exige el Consejo Estatal de Participación Social en la Educación (CEPSE) al Instituto de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO).
"¡Ya no vamos a permitir chantajes. Nuestro reclamo es que debe haber clases! Los niños ya llevan un mes sin pisar las aulas y los padres de familia no podemos permitir que siga pasando esto", dijo Luisa García, presidenta de este órgano que da voz a la sociedad oaxaqueña en el sistema educativo.
Este martes, integrantes de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) rechazaron el reinicio de clases en esta región, a pesar de que la mayoría de las escuelas de educación básica ya cuentan con su respectivo dictamen de seguridad realizado por los directores responsables de obra.
"Las autoridades ya emitieron sus dictámenes, ya está el aval de Protección Civil, entonces esto es nadamás un pretexto para la Coordinadora que está politizando este asunto".
"Por eso nuestra exigencia de que se apliquen los descuentos y los despidos a quienes se oponen a que haya clases, pues días no trabajados, días no pagados", expuso García.
Agregó que los recursos que se obtengan por los descuentos se deben aplicar a mejorar las instalaciones de los planteles "que tanta falta nos hace aquí en Oaxaca".
