La candidata del presidente Donald Trump para ocupar la dirección de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Gina Haspel, reconoció por primera vez que la agencia no debió haber implementado un polémico programa para torturar e interrogar a los sospechosos de terrorismo tras los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.
Así se manifestó en una carta pública enviada al senador Mark Warner, el demócrata de mayor rango en el Comité de Inteligencia del Senado, donde la agente compareció la semana pasada.
[caption id="attachment_740431" align="aligncenter" width="980"] Foto: Especial[/caption]
En la misiva, Haspel puso las palabras que se había negado a decir durante la audiencia de la semana pasada, cuando los senadores le pidieron sobre el programa que la agencia bautizó como “técnicas de interrogatorio mejoradas” y que consistía en torturar a sospechosos de terrorismo para extraerles información.
“Con el beneficio de la retrospectiva y de mi experiencia como líder de una agencia, el programa de interrogatorio mejorado no es uno que la CIA debería haber emprendido”, manifestó.
La agente, quien estuvo dentro del programa en una prisión secreta en Tailandia, expresó que desde los atentados de septiembre tanto ella como la CIA se han llevado “duras lecciones” y reconoció que el programa de interrogatorios acabó “dañando” a los oficiales y a la “posición en el mundo” de Estados Unidos.
Haspel ha trabajado por 33 años como agente encubierto y solamente en las últimas semanas la CIA ha difundido el destino de algunas de sus misiones, en un esfuerzo por lavar la imagen de la agente y obtener el apoyo de la mayoría de senadores.
Lo que más preocupa a los legisladores es el papel que tuvo Haspel en 2002, cuando se encargó de supervisar una cárcel secreta que la CIA tenía en Tailandia y donde fueron interrogados dos sujetos acusados de pertenecer a Al Qaeda: Abu Zubaida y Abd al Rahim al Nashiri.
Haspel se encuentra en una posición complicada, pues los republicanos del Senado tienen una estrecha mayoría de 51 escaños frente a 49 demócratas, y algunos de los primeros, como Rand Paul y John McCain, ya anunciaron que votaran contra su confirmación.
Por su parte, el senador por Virginia Occidental, Joe Manchin, y el senador por Indiana, Joe Donnelly, ambos demócratas, señalaron que votarán a favor de Haspel.
Haspel ingresó a la CIA en 1985 y funge como titular de ésta de manera interina, luego del nombramiento de Mike Pompeo como secretario de Estado.
De confirmarse por el Senado, Gina Haspel sería la primera mujer en estar al frente de la agencia.
ntb