El gobierno federal no puede reconocer, afirmar o suponer que hay una crisis nacional en materia de seguridad y derechos humanos, aunque sí haya problemas y “retos formidables” hacia adelante, afirmó el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida.
El funcionario respondió preguntas de los senadores durante su comparecencia como parte de la glosa del Sexto Informe de Gobierno, en la que legisladores de todos los partidos le plantearon problemas en materia de seguridad.
“Suponer que México está en crisis, es menospreciar los esfuerzos de miles de mexicanos, de cientos de organizaciones, de un sistema que ha costado muchos lustros consolidar en el combate a la inseguridad", afirmó, luego de que los legisladores de todos los partidos le plantearon las desapariciones forzadas y violaciones a derechos.
Al respecto, en la primera ronda de preguntas, el senador sin partido y expresidente de la Comisión de Derechos Humanos capitalina, Emilio Álvarez Icaza, recordó que prevalecen problemas como las desapariciones, los asesinatos y la impunidad en casos como el de los normalistas de Iguala.
En el mismo sentido, la senadora Nadia Navarro Acevedo, de Acción Nacional, recordó que el informe 2017 de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos habla de problemas graves en esa materia, además de la violación al derecho de la libertad de expresión.
En respuesta conjunta a estos y otros planteamientos, Navarrete Prida reconoció que preocupan al gobierno la impunidad y los ataques a la libertad de expresión, aunque en éste último detalló que de 2012 a la fecha, 900 personas se han acogido al Mecanismo de Defensa para Defensores de Derechos Humanos y Periodistas.
Respecto al exgobernador de Chihuahua, César Duarte, el funcionario federal aseguró que de las 15 órdenes de aprehensión que hay en su contra, al menos 12 se refieren a delitos considerados no graves y por eso no ha sido enviado a México.
Como parte de los cuestionamientos, varios senadores coincidieron en criticar la política del gobierno mexicano en cuanto a la migración, especialmente el trato que se le da a los migrantes en México y en particular a la caravana migrante de Honduras.
Según Navarrete Prida, el gobierno mexicano no ha detenido a ninguna de esas personas, pero aclaró que los extranjeros que forman parte de ese grupo, no se ajustan a los supuestos que establece la ley para solicitar refugio.
En ese sentido, consideró necesario que a esas personas no se les engañe, pues no son perseguidas por México, e insistió en que nuestro país condenará cualquier acción de gobiernos extranjeros que derive en violación a derechos humanos de las poblaciones migrantes.
Por lo que toca al sistema de justicia y a la acción de las policías para combatir la inseguridad pública, el secretario de Gobernación recordó que hay indefinición en la materia que se arrastra desde hace varias décadas, sobre cuál es el modelo policial que se debe aplicar en los ámbitos locales.
En todo caso, enfatizó Navarrete Prida, existe una debilidad institucional en la que 25 por ciento de los municipios carecen de policías y de armas, en tanto 50 por ciento de los homicidios violentos ocurren en sólo 57 municipios del país.
Y en lo que toca al sistema de justicia, reconoció que es perfectible y se puede mejorar, si bien ha costado tiempo. Lo importante es mejorar la investigación policiaca, para prevenir la llamada “puerta giratoria”.
kl