Se distingue de entre todos los demás por sus vistosos tatuajes, sus tenis de marca y sus aires de suficiencia. A leguas se ve que no es un migrante cualquiera. Mientras descansa en la plaza principal de Mapastepec son visibles sus “garras” o “rayas” en los brazos, es decir, sus tatuajes; y uno que destaca: el de un arma AK-47.
Es un integrante de la Mara Salvatrucha. Es uno de las decenas de delincuentes que se infiltraron en la caravana migrante desde que ésta salió de San Pedro Sula, Honduras. A unos metros de él, otro Mara luce tatuajes en los brazos entre los que destaca uno con el número 13 que identifica a su “clica” o pandilla. Según los coordinadores de la caravana, son alrededor de 50 Maras los que lograron infiltrarse en la caravana.
“Los hemos visto, son muchos, como 50, pero se mezclan con la gente. En el día no hacen nada, pasan desapercibidos, pero en la noche se van para otros lados y llegan como de mañana, ya cuando nos vamos, como a ver qué encuentran o como mensajeros”, dice Yamali S. Tiene miedo. La noche anterior durmió junto a uno de ellos.
Los Maras están ahí. Durante el tiempo transcurrido en la caravana han recurrido a la estrategia de diseminarse entre las multitudes para pasar un poco inadvertidos. Por momentos se cubren los brazos y la cabeza para ocultar los tatuajes, pero tarde o temprano se hacen evidentes.
[caption id="attachment_817666" align="alignnone" width="696"] Migrantes hondureños. Foto: Jorge Butrón, La Razón[/caption]
Richard Madariaga de 17 años, migrante hondureño que viene con el grupo, fue extorsionado por los Maras en Huixtla. “Me llamaron porque estaba despierto; me dijeron que cuánto traía y pues qué voy a traer si vengo solo; sólo me amenazaron y me dijeron que si boteaba les diera algo”, narra.
Cuando la caravana llegó al Río Suchiate, frontera entre México y Guatemala, los Maras jugaron un papel determinante para que miles de migrantes pudieran internarse en territorio mexicano. No es extraño, este grupo delictivo también se dedica a traficar con gente.
Por momentos varios Maras se juntan y se dan una vuelta por la zona de tolerancia de Mapastepec, en donde hay una elevada incidencia de trata de personas. Se mueven con familiaridad y naturalidad. Parecen estar en su ambiente. Y a uno de ellos no le importa lucir su tatuaje con tres puntos en el codo.
[caption id="attachment_817665" align="alignnone" width="696"] Migrantes hondureños. Foto: Jorge Butrón, La Razón[/caption]
Este reportero tuvo la oportunidad de acercarse a uno de ellos, mientras compraba cosas en una tienda: “yo si quiero me voy hasta Tijuana, pero tengo que venir en la caravana para que no haya bronca. Ando muy estresado y muy maleado, ahorita no me toquen porque encajo... pinche sol, es cagante”, comentó. Y luego, festivo, confesó que durante toda el periplo de la caravana ha venido consumiendo cerveza.
Un grupo de Maras llegó como “avanzada” de la caravana en su trayecto de Huixtla a Mapastepec. Aquí se sienten bien y la población parece estar familiarizada con ellos. Pero no para bien, sino para mal, porque con frecuencia asaltan a quienes entran a la zona de tolerancia, o bien, se pelean entre bandas rivales.
“Acá está muy duro, se pelean entre ellos; son las bandas maras 18, 13 y Sol; entre ellos se matan y entre ellos se machetean”, explicó a La Razón un taxista de la zona.
La caravana migrante ya se encuentra en Pijijiapan, con todo y los Maras infiltrados. Y así seguirán por lo menos hasta llegar a Oaxaca, en donde hay núcleos importantes de integrantes de esta mafia, siempre a la espera del paso de migrantes.
[caption id="attachment_817664" align="alignnone" width="696"] Migrantes hondureños. Foto: Jorge Butrón, La Razón[/caption]
Trump amaga con enviar tropas
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció ayer su intención de enviar militares a la frontera con México para frenar la caravana migrante procedente de Honduras.
Medios estadunidenses hablan de que ya se tienen listos 800 soldados para ser enviados a la frontera, los que se unirían a los cerca de dos mil 100 miembros de la Guardia Nacional en la región.
Horas más tarde, el mandatario emitió un segundo tuit en el que advirtió que no permitirá que los migrantes ingresen ilegalmente a Estados Unidos. “¡Vuelve a tu país y si quieres, solicita la ciudadanía como millones lo están haciendo!”.