La próxima secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Josefa González Blanco, reconoció que aún no existen estudios de impacto ambiental del proyecto del Tren Maya.
Pese a ello, señaló que la consulta ciudadana para decidir si se realiza el proyecto, prevista para el 24 y 25 de noviembre, sí se llevará a cabo.
“Aún no está la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del Tren Maya, estamos trabajando en ella. Vamos a hacer la consulta” sin este estudio técnico-científico de carácter preventivo y de planeación, indicó.
Durante su participación en el Primer Foro de Análisis de la Política Ambiental Mexicana, convocado por el Senado, señaló que la consulta será sólo para conocer la opinión de los ciudadanos para saber si aprueban o no el proyecto; sin embargo, agregó que de ser aceptado, se realizará dicho estudio.
“La Semarnat emitirá la Manifestación de Impacto Ambiental, así como las recomendaciones que deban ser tomadas en cuenta para la conservación y protección de los recursos naturales”, aseguró.
Asimismo, indicó que la dependencia sería la que realice este estudio técnico que contiene información sobre los posibles daños al ambiente, y las medidas de mitigación de los mismos.
Además, subrayó que la próxima administración tiene un mandato claro, de cuidar y proteger el ambiente, “y lo vamos a hacer en la forma que sea posible con una visión de sustentabilidad, armonía entre el hombre y la naturaleza, de bienestar y justicia bajo un enfoque que nos obliga a garantizar, proteger y respetar los derechos de las personas y las comunidades”.
De acuerdo con la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGIPE), los plazos de ley para evaluar las manifestaciones de impacto ambiental de una obra de infraestructura son 60 días, prorrogables hasta 120.
Con dicho requerimiento, es imposible que los estudios estén listos para el 17 de diciembre, fecha anunciada para iniciar la obra del Tren Maya.
El Dato: La consulta a comunidades indígenas del sureste acerca del Tren Maya se haría en sus lenguas y bajo los más altos estándares internacionales aplicables: Josefa González.
Además, la ley establece que se deberá realizar otra consulta entre las comunidades indígenas del sureste mexicano.
Al respecto, González Blanco afirmó que este ejercicio aún no se ha hecho, pero sí se cumplirá con este requisito.
“La consulta ciudadana no sustituye a la otra con pueblos indígenas; una es de opinión y la otra más adelante será la que marca la ley. Este proyecto será consultado en las comunidades. Los distintos mecanismos de consulta, información, serán integrados a un sistema de participación que será clave para asegurar el desarrollo del proyecto”, apuntó.
Además de los estudios ambientales, el Tren Maya requiere otros en materia de ingeniería, mercado, administrativos y financieros, que aún se desconoce si ya están listos.
Proyecto
El tren detonará la economía y el turismo sustentable.
Interconectará las principales ciudades y zonas turísticas de la península de Yucatán.
Tendrá una inversión estimada de entre 120 y 150 mil mdp.
Para minimizar el impacto ambiental y social se utilizarán principalmente derechos de vía existentes.
El recorrido sería en tres tramos: Selva, Caribe y Golfo.
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