Abordo de camiones escolares, y al entrar por un acceso improvisado para tal fin, diputados de todos los partidos lograron romper el cerco que mantuvieron 20 organizaciones campesinos en torno al Palacio Legislativo de San Lázaro en protesta por los recortes al sector, a fin de discutir aprobar el Presupuesto de 2019.
Durante la madrugada, personal de la Cámara de Diputados retiró unos tubos de un tramo de reja para crear un acceso improvisado al estacionamiento tres, sobre la calle Sidar y Rovirosa.
Al filo de las 10:00 horas de ayer, autobuses escolares escoltados por patrullas comenzaron a rodear el inmueble, sitiado por los inconformes de Antorcha Campesina. Por ahí entraron, siempre resguardados por la policía, diputados, personal de apoyo y representantes de los medios de comunicación.
El dato: Alrededor de 400 militantes perredistas marcharon para exigir más recursos a municipios.
De donde llegaban los camiones y uno que otro auto particular que se alcanzó a colar, había que caminar unos dos kilómetros para llegar a los edificios en donde se llevan a cabo las actividades legislativas.
Aún así, desde la noche anterior ya se tenían listos recintos alternos en el Centro Banamex o en el World Trade Center (WTC), en caso de que esta estrategia fallara. Pero no fue necesario.
Y es que los campesinos no eran los únicos inconformes con el recorte. Afuera del recinto, alcaldes pedían mayores recursos para infraestructura, seguridad pública y combate a la pobreza, y que no desaparezca el Ramo 23, destinado a infraestructura.
El presidente de la Asociación de Autoridades Locales de México (AALMAC) y alcalde de Tepic, Nayarit, Francisco Javier Castellón, dijo a La Razón que aunque en el discurso del Presidente dicha partida es la partida de los “moches”, en realidad sirve para la pavimentación, alumbrado público y otros rubros en zonas marginadas.
A las 12:30 horas, con la certeza de que se discutiría el presupuesto dentro de San Lázaro, se logró el quórum de 357 diputados; sin embargo, apenas había iniciado la sesión cuando el presidente de la Mesa Directiva, Porfirio Múñoz Ledo, decretó un receso.
Se trataba de darle tiempo a la Comisión de Presupuesto para que negociara el predictamen. El priista Fernando Galindo, secretario de ésta, reclamó ante el morenista que habían sido citados a las 9:00 horas en un hotel de la Ciudad de México, sin que se conociera el predictamen.
Cerca de las 14:00 horas empezó a sesionar dicha comisión y a las 15:30 horas ya estaba aprobado el dictamen con 34 votos a favor de la mayoría de Morena y sus aliados y 14 en contra del PAN, PRI, PRD y MC. A partir de las 18:00 horas el documento fue al pleno, en donde hasta el cierre de esta edición continuaba la discusión en lo particular.
Después de tres días de plantón, y tras reunirse con el líder de los diputados de Morena, Mario Delgado, los antorchistas retiraron su plantón luego de que les ofrecieron las obras y los servicios solicitados serán considerados en el presupuesto.