Enviado en Tlahuelilpan, Hidalgo
Luego de 10 horas de mitigado el fuego en el ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) que dejó hasta el momento un saldo de 66 muertos y 77 heridos, peritos federales y estatales continúan los peritajes en San Primitivo, Tlahuelilpan, Hidalgo, en donde personas continúan a la espera de reconocer a sus familiares.
Rodeados de un centenar de personas, los peritos realizan sus funciones, mientras una parte de los elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo, resguardan la zona acordonada.
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Hasta el momento, los peritos han logrado retirar una parte de los restos humanos, los cuales, por el estado de calcinamiento, deberán ser identificados a través de pruebas de ADN, según señalaron doctores que trabajan en la zona.
Los restos serán trasladados al Sistema Forense de la entidad para que familiares arriben a realizar las pruebas pertinente.
Por el tiempo que llevan los trabajos, peritos han decidido tapar los diferentes cuerpos que aún permanecen en la zona, sin embargo, no se puede estimar el número, debido a que muchos restos quedaron consumidos.
Se han encontrado desde zapatos, bicicletas, hasta anillos, cadenas y diferentes objetos.
La desesperación de las personas comienza a mermar los ánimos, piden que les den razón de sus familiares, pues piensa que están desaparecidos.
“No hay personas desaparecidas, hay no identificadas, incluso en hospitales. Les pedimos de favor dejen a los peritos hacer su trabajo. Si no los dejan pasar es porque no hay rastros para que puedan ser identificados”, señaló una oficial de la PGJEH.
Piden continuar con búsqueda de restos
Pobladores y familiares de las víctimas pidieron a los peritos federales y a la Policía Federal ampliar la zona de búsqueda de restos, por lo que decidieron tapar la salida principal.
Testigos del siniestro señalan que sobre la zanja de aguas negras, por donde corre el ducto afectado y que fue tapado por expertos de Petróleos Mexicanos (Pemex) para evitar la salida del combustible, pudieron haber quedado más restos de personas.
“Hay gente cabrones, tomen fotos”, gritan los pobladores quienes taparon la salida de las camionetas con los restos.
“Falta mi carnal, hagan bien su trabajo” “o que nos desmientan”, se logra escuchar entre el tumulto.
Sobre la zona bajo resguardo, aún se pueden ver galones inservibles, zapatos y ropa.
Es lo único que quedó del siniestro, además de una pradera de alfalfa perdida en su totalidad.
El ducto fue abierto por un grupo dedicado al robo de combustible en el poblado de Teltipan, en Tlaxcoapan, Hidalgo, según narraron pobladores, pues, aseguran, la mayor parte de los habitantes de ese lugar se dedican al ilícito.
Las narraciones señalan que la mayoría de las personas que arribaron al lugar tuvieron conocimiento de que allí “se estaba regalando gasolina”.
“Bajamos, pero yo soy ignorante, yo no me dedico a eso. No podía ni agarra un litro, imagínese”, comentó uno de los pobladores al momento en que personal de la Agencia de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la República (FGR), señalaba que “se va a revisar todo, hasta la zanja”.
Cerca de las 10:46 de este sábado, los cuerpos fueron retirados de la zona para su posterior identificación, por lo que la molestia se apoderó de la gente.
Los lugares hasta ahora señalados para la atención de las víctimas en los Ministerios Públicos de Mixquiahula y Tula.
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