Mercancía varada, flujo comercial afectado y maquiladoras con un menor ritmo de producción son algunas de las afectaciones que han padecido municipios colindantes con Estados Unidos ante el cierre parcial de la frontera que ordenó el mandatario Donald Trump.
Por ello, los alcaldes de Piedras Negras, Ciudad Juárez y Mexicali llamaron a evitar el cierre total de las garitas ante las severas afectaciones que ocasionaría para la economía de la región.
En entrevista con La Razón, el edil de Piedras Negras, Claudio Mario Bres, aseguró que ya hay consecuencias para la ciudadanía, quienes tienen que esperar horas para poder cruzar; y ello también se refleja en el flujo comercial.
“El cierre de la frontera nos preocupa más que las caravanas de migrantes, los cierres parciales ya nos está dejando una reducción de la aduana y lo vemos con las afectaciones por horas para poder cruzar, situación que nos perjudica a todos con el paso de comercio”, dijo.
La amenaza de EU, opinó, tiene tintes políticos.
“Debe quedar claro que la frontera no se puede cerrar; se puede limitar, pero no cerrar; hay un mal concepto al respecto y es un juego político por parte de Estados Unidos para meter presión a nivel federal”, indicó.
Armando Cabada Álvarez, alcalde de Ciudad Juárez, abundó que las maquiladoras serán las más golpeadas, por ello se buscará un diálogo con la Federación, para que tome cartas en el asunto.
“Tenemos mercancía varada, no pueden cruzar, por eso también nos reunimos con organismos empresariales para plantear ante el Gobierno federal la situación que se vive en la frontera con El Paso, Texas. Debe tener una postura más firme”, precisó.
Gustavo Sánchez Vázquez, edil de Mexicali, advirtió que más de 74 mil familias subsisten de la industria maquiladora, por lo que un posible cierre total impactará en los procesos de producción, así como de importación y exportación.
“He visitado algunas de estas empresas y me he encontrado con familias que viven de la industria de exportación y podrían ser afectadas”, refirió.
El presidente municipal de Tijuana, Juan Manuel Gastélum, refirió que de concretarse la medida, la economía del norte del país se vería severamente golpeada.
Recordó que sólo el cierre por unas horas de la garita de San Ysidro, el pasado 25 de noviembre, causó pérdidas por 100 millones de pesos del lado mexicano.
Para la ciudad, los sectores más afectados serán clínicas, consultorios dentales y la industria restaurantera, entre otros.
El secretario del Ayuntamiento de Nuevo Laredo, Tamaulipas, Raúl Cárdenas Thomae, apuntó que sólo existe un carril habilitado en el Puente Internacional II Juárez-Lincoln, que provocó largas filas durante el fin de semana.
“El carril de locales va a seguir y más en este tipo de temporalidades en las que ha habido mucha afluencia”, dijo.