De los alrededor de 12 millones de migrantes ilegales en Estados Unidos, dos mil familias son el objetivo principal de las redadas que comenzarán en 10 ciudades de la nación americana el próximo domingo.
Los extranjeros susceptibles de deportación son aquellos cuyos trámites de residencia o asilo fueron denegados por cortes migratorias, por lo que los agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) ni siquiera necesitan una orden de aprehensión para detenerlos, explicó la directora de comunicaciones del Instituto de Políticas de Migración, Michelle MIttelstadt, en entrevista con La Razón.
“No es que no tengan una orden, sino que al ser rechazadas sus solicitudes todas estas personas pueden ser detenidas y deportadas en cualquier momento. Incluso, de acuerdo con reportes en los medios, los elementos de Migración pueden detener a personas que estén en las inmediaciones si sospechan sobre su estatus legal en el país”, señaló.
“La administración de (Donald) Trump está tratando de enviar un fuerte mensaje a Centroamérica, en particular a las familias, señalando que aunque vengan a Estados Unidos con un niño no van a permanecer en el país”.
La experta de la organización que evalúa las políticas migratorias del gobierno y de otras regiones del mundo explicó que las autoridades buscan a migrantes de reciente ingreso, luego que la cifra de ilegales detenidos en la frontera con México se disparó en mayo hasta alcanzar los 144 mil 278. De acuerdo con el instituto que encabeza, hasta un millón de ilegales en la nación tienen órdenes de deportación.
El amago que lanzó Trump en junio pasado se pospuso cuando se filtró a medios de comunicación la fecha en la que comenzarían los operativos, lo que algunos actores políticos interpretaron como una amenaza para negociar una reforma al sistema de inmigración con los demócratas. De esta manera, el mandatario adelantó el pasado viernes que las redadas comenzarían “muy pronto”, informó The New York Times.
“La próxima semana ICE comenzará el proceso de remover a los millones de extranjeros ilegales que ilícitamente han encontrado su camino hacia Estados Unidos. Serán eliminados tan pronto como entren. México, usando sus fuertes leyes de inmigración, está haciendo un muy buen trabajo al detener a las personas”, destacó el presidente de EU el pasado 17 de junio en redes sociales.
Las ciudades en las que presuntamente comenzarán las detenciones son Nueva York, San Francisco, Los Ángeles, Miami, Atlanta, Baltimore, Chicago, Denver, Houston y Nueva Orleans, entre otras, identificadas como las principales en las que los migrantes se encuentran.
Expertos de la propia agencia señalaron que es imposible detener a los millones de extranjeros irregulares que radican en Estados Unidos, porque sólo cuentan con 20 mil agentes, contrario a lo que prometió Trump al inicio de su gestión de aumentar el número de elementos en el departamento.
Además, señalaron que no está claro el éxito de los operativos, ya que ninguna autoridad puede entrar legalmente a una casa a realizar el arresto; por ello se detalla que los migrantes simplemente no deben abrir la puerta.
Ante esta situación, colectivos, grupos de abogados y ONG en Estados Unidos han comenzado a alertar a comunidades migrantes sobre las medidas que deben adoptar para evitar la deportación.
Know Your Rights, por ejemplo, distribuye tarjetas en las que los portadores establecen que se reservan su derecho a declarar mientras no esté presente un abogado; entre otras recomendaciones están no abrir la puerta a los oficiales del ICE.
De acuerdo con Mittelstadt, esta situación ha provocado que la gente que se siente amenazada no asista a sus centros de trabajo y evite salir de sus hogares, así como usar transporte público.
Detenciones en frontera caen 28% en junio. Las aprehensiones de migrantes ilegales cayeron casi 30 por ciento el mes pasado, informaron autoridades de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
Luego que en mayo pasado se reportaron 144 mil migrantes detenidos, el mes pasado la cifra se redujo a 104 mil 344; sin embargo representa un incremento de 241 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior.
De las 94 mil 897 personas detenidas por cruzar ilegalmente, siete mil fueron menores no acompañados; 57 mil unidades familiares, y 30 mil adultos solos. En tanto, nueve mil 447 personas fueron declaradas inadmisibles.
Una vez más los sectores de la patrulla fronteriza con el mayor número de cruces ilegales fueron Río Grande y El Paso.
Con información de Jorge Butrón
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