Casi 60 por ciento de los ocho mil programas que existen a nivel federal, estatal y municipal —cuatro mil 800— para combatir la pobreza en el país, han sido ineficientes porque están más enfocados en atender el tema presupuestario y no las necesidades de la población más vulnerable, alertó José Nabor Cruz Marcelo, secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
“El 57 por ciento, casi 60 por ciento de programas sociales fueron insuficientes en cuanto a sus alcances y sus resultados, por lo que las conclusiones en la reducción de la pobreza no fueron más plausibles”, indicó en entrevista con La Razón.
Sin embargo, precisó que hubo un cierto avance de estos planes que lograron disminuir el nivel de pobreza extrema, pues hay tres millones de personas que salieron de esta condición en el periodo de 2008 a 2018.
El economista por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) detalló que la mayoría de los proyectos sociales no han sido eficientes porque se apegaron más a un criterio presupuestario que en alcanzar las metas que generen las sinergias, para disminuir los índices de pobreza en el país.
Manifestó que para poder tener un combate efectivo en el corto plazo en este rubro no solamente es necesario desburocratizar los programas sociales, sino también mejorar la política macroeconómica del país, como disminuir la informalidad, bajar la inflación y crear empleos mejor remunerados, entre otros, para elevar los niveles de ingreso y el poder adquisitivo de los mexicanos, así como también aumentar su ingreso a la seguridad social.
El lunes, el Coneval dio a conocer su diagnóstico sobre la pobreza en México y anunció que ésta se redujo de 44.4 a 41.9 por ciento. En el documento sostiene que la mayor carencia social es el acceso a la seguridad social, pues hay 71.7 millones de personas en esta condición, es decir, el 57.3 por ciento de la población.
Y la segunda de mayor incidencia es el ingreso insuficiente para adquirir la canasta básica, que afecta a 61.1 millones de personas, que es casi la mitad de los habitantes del país.
Cruz Marcelo apuntó que más que reducir o no los programas sociales en el próximo Presupuesto de Egresos de la Federación, lo que se requiere es contar con planes que permitan evaluar de manera eficaz los proyectos sociales.
“Se requieren programas con indicadores de evaluación para tener más control de la parte presupuestal y de las metas y los objetivos, que tengan esos indicadores de alcance de metas”, precisó.
El también investigador del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM sostuvo que uno de los factores por los cuales se pudo haber reducido la pobreza extrema, son los apoyos en efectivo que brindan diversas instituciones gubernamentales a nivel federal y local, más que por una mejoría en la economía del país.
El Dato: Hidalgo, Tlaxcala y Aguascalientes son los estados que tuvieron mayor reducción en el porcentaje de población en situación de pobreza.
Apuntó que alrededor de 65 por ciento de los ingresos de las personas en dicha situación, se da por transferencias de los programas gubernamentales, por remesas o de los familiares. Por lo que el menor porcentaje recibe ingresos por su fuente de trabajo.
La gente que está en esta circunstancia tiene ingresos de entre mil y mil 500 pesos, tanto en zonas rurales como urbanas. Mientras que el costo de la canasta básica, en agosto de 2018 que se levantó el estudio, fue de mil 516 pesos para zonas urbanas y de mil 73 para las rurales.
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