Ángel Aguirre, exgobernador de Guerrero, solicitó a la Fiscalía General de la República (FGR) incluir en la investigación acerca de la desaparición de los 43 normalistas de Iguala las actas de las reuniones que sostuvo con el Grupo de Coordinación Guerrero, es decir, con el Ejército y la Policía Federal.
Luego de más de cinco horas de comparecer ante el órgano autónomo, Aguirre Rivero dijo que acudió a ampliar su declaración porque se comprometió a colaborar con la Comisión de la Verdad, para esclarecer los hechos ocurridos entre el 26 y 27 de septiembre de 2014.
Al salir de las oficinas, a las que también acudió el exfiscal estatal, Iñaki Blanco, reprochó la negativa del entonces Centro de Investigación y Seguridad Social (Cisen) a entregar expedientes del caso.
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“No entendemos por qué ha habido esa negativa de entregarnos una copia de las mismas (actas), ya que seguramente éstas servirán para dejar constancias (de) quienes en todo momento tuvimos un compromiso para que se conocieran las acciones que emprendimos, antes de estos lamentables hechos”, añadió.
Aguirre insistio que nunca tuvo relación con el exalcalde de Iguala, José Luis Abarca, y reiteró: “me deslindo de cualquier tipo de relación que nos vinculara”.
Añadió que se presentó en calidad de testigo y dialogó con Alejandro Gertz Manero, titular de la FGR.
Por lo anterior, Aguirre Rivero agregó “nunca me voy a amparar, yo acudiré las veces que sean necesarias”.
