Diputadas morelenses, integrantes del Frente Progresista de Mujeres, acudieron ante la senadora del Partido Acción Nacional (PAN), Josefina Vázquez Mota, para exponer la violencia política de género que padecen en el Congreso local, además de la crisis por la que atraviesa la entidad.
En el Senado de la República, las legisladoras del Partido del Trabajo (PT), Tania Valentina Rodríguez Ruiz, Erika García Zaragoza, Naida Díaz, de Morena, Keila Figueroa, expusieron la ola de violencia, feminicidios, secuestros, extorsión, ente otros delitos que no están siendo atendidos por el gobernador Cuauhtémoc Blanco.
Por su parte, la coordinadora de la bancada del PT, Tania Valentina Rodríguez, señaló que un grupo de siete legisladoras se han unido para ser la voz crítica de un mandatario que no “existe en la entidad, tres veces se ha ausentado por andar de vacaciones, hay un hermano incómodo Ulises Bravo, que hemos señalado, eso nos ha costado amenazas”.
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Rodríguez Ruiz, expresó que al frenar los abusos de Ulises Bravo, se enfrentan a una violencia política en el Congreso, no quieren respetar las dos terceras partes para ser mayoría calificada, “han hecho un grupo de 13 diputados que tapan al gobernador, se nos está cayendo el estado, somos segundo lugar en feminicidios, aumentó al cien por ciento la extorsión, somos un estado fallido”.
Mientras que la diputada petista Naida Díaz, denunció que las legisladoras del Frente Progresista de Mujeres, sufren de persecución política de los órganos de la presidencia del Congreso local, a través de amenazas e intimidación.
Dijo que las revanchas políticas por parte del grupo mayoritario de Morena, tienen la finalidad “de amedrentarnos para evitar que seamos una voz crítica de la administración de Blanco Bravo”.
Al respecto, la diputada morenista, Keila Figueroa, puntualizó que debido a que ella no está a favor de votar “con los ojos cerrados”, las iniciativas que envía el Ejecutivo estatal, su fracción parlamentaria tomó la decisión de excluirla de la coordinación del grupo parlamentario.
“Esta decisión la toman por separarme de los ideales de Morena, ellos decidieron expulsarme de la bancada en un procedimiento ilegal, a esos extremos hemos llegado”.
Por su parte la legisladora petista, Erika García Zaragoza, detalló que fue víctima de un atentado donde, abordo de su camioneta, recibió 20 balazos; al solicitarle apoyo al gobernador este le manifestó que no le podría brindar algún tipo de protección ya que no tenía recursos para escoltas.
“Cara a cara en Palacio de Gobierno, me dijo con groserías que no podía darme ayuda, que le hiciera como pudiera, quieres protección págalo con tu dinero o vete a la Federación, con la impotencia me fui.
Posteriormente me vuelven a llamar y me ofrecen protección si traiciono a mi partido, a mi coordinadora Tania Valentina y me adhiera a su partido el Partido Encuentro Social (PES)”, detalló la legisladora.
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