Luego del tiroteo registrado en una escuela de Torreón, Coahuila, donde un niño de 11 años de edad generó un tiroteo que cobró su vida y la de una docente, expertos, instituciones y organismos sociales pidieron al Gobierno de México un mayor control de armas en el país, así como combatir la violencia escolar y promover la cultura de la paz.
Javier Oliva Posada, experto en seguridad de la UNAM, dijo a La Razón que este hecho hace evidente que sigue sin control la disponibilidad de armas ilegales en el país, y pone el foco en la facilidad que los jóvenes tienen para adquirirlas.
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“Afortunadamente en México todavía no son frecuentes, pero comienzan a darse situaciones como las de Estados Unidos donde alrededor de 60 por ciento de los homicidios colectivos se realizan en centros escolares, comenzamos a ver que esto se manifiesta en México, con el agravante de que la disponibilidad de armas ilegal sigue sin control”, comentó.
El especialista explicó que, a diferencia de lo que ocurre en el país vecino, en México existe una mayor cohesión social, y una estructura familiar diferente; por lo que lo ocurrido en Coahuila evidencia que “el funcionamiento del sistema social mexicano está observando ajustes negativos” en términos de violencia.
Puntualizó que aunque no se puede calificar como “una tendencia” este tipo de actos, debido a que la violencia tiene que ver con las prácticas sociales y el ambiente donde se desarrollan los jóvenes, aseguró que de no contenerse “podría ser que en mediano plazo este tipo de eventos ocurran con cierta frecuencia”.
Al respecto, el presidente de la Red por los Derechos de la Infancia (Redim), Juan Martín Pérez, consideró urgente que se controle el ingreso de armas ilegales de EU, porque los menores pueden tener fácil acceso a las mismas.
Añadió que el país está en un contexto de guerra donde se reproduce la violencia en todos los ámbitos de la vida y donde se da el mensaje de que las cosas se resuelven por la vía armada, por lo que el menor protagonizó el tiroteo en Coahuila nació en un país con guerra y reprodujo la violencia armada del contexto mexicano.
“Las familias se quieren proteger y en consecuencia se arman de manera ilegal y se da, porque están en un entorno de crimen organizado; por ello la importancia de este hecho está vinculado con la impunidad de las armas”, señaló.
Por separado, la Secretaría de Gobernación (Segob), a través de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), reiteró la necesidad de fortalecer corresponsablemente, en lo familiar, escolar y comunitario, así como en los tres órdenes de gobierno, las acciones en contra de las violencias que aquejan a la niñez y adolescencia en el país, pero siempre en un enfoque orientado a proteger los derechos humanos de los menores, sin criminalizar a las víctimas.
“Las violencias no sólo se consuman en un tiroteo en una escuela como el ocurrido, sino son violencias cotidianas como el castigo corporal, abuso sexual, los homicidios y feminicidios, y los suicidios que afectan la vida de niñas, niños y adolescentes y que como país hemos ido normalizando e invisibilizando”, dijo.
El organismo detalló que entre las acciones que desarrollan, la Segob trabaja en la “revisión de los lineamientos de la clasificación de contenidos audiovisuales” de radio y tv restringidos “y en la elaboración de los correspondientes para la comercialización de videojuegos”.
Además, dijo, el Sipinna “revisará dos temas, el de salud y acompañamiento socioemocional, así como control en el acceso a armas de menores de edad”.
Por separado, la Organización de las Naciones Unidas (ONU)-México expresó que “la disponibilidad de armas deja poco espacio entre los impulsos asesinos y las acciones que resultan en la muerte. Así, el viaje entre las creencias llenas de odio y los crímenes violentos de odio se acelera.
“La sociedad paga un alto precio por no enfrentarse y no tomar las medidas necesarias para proteger a las personas de la violencia armada. Por ello, es indispensable combatir el tráfico ilegal de armas”, refirió.
Finalmente, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) consideró que este hecho evidencia la debilidad del Estado de derecho y la grave situación de inseguridad.
“La violencia en las escuelas no es ocasional, sino cotidiana y común, que se manifiesta de muchas maneras y en los últimos años ha convertido a los planteles en espacios de riesgo, por lo cual debe impulsarse la educación en derechos humanos como estrategia de intervención para atender la violencia escolar”, detalló en un comunicado.
Rechazaron Mochila Segura; ahora es obligatoria
En octubre de 2019 un grupo de padres de familia del Colegio Cervantes en Torreón, Coahuila, se opuso a que se implementara el operativo Mochila Segura porque no querían que personas ajenas revisaran las pertenencias de sus hijos, además de que consideraron que por las condiciones de su comunidad, no requerían esa medida.
En un documento fechado el 4 de octubre, que fue difundido en redes sociales por la directora del plantel, Catalina Mireles, se detalla que la situación fue notificada en su momento a la supervisora de la Zona Escolar 506.
Luego del tiroteo, el alcalde de Torreón, Jorge Zermeño, pidió a los directores de las escuelas del municipio ayudar a revisar las mochilas y crear alertas para que no se vuelva a repetir una situación similar.
Sin embargo, organizaciones como la Red por los Derechos de la Infancia (Redim) se manifestaron en contra de la revisión de mochilas “por ser un acto de discriminación institucional que ha demostrado ser un fracaso para atender y prevenir los casos de violencia escolar. Implementar este operativo en cualquier orden de gobierno sería una violación a los derechos humanos”.
Con información de Frida Sánchez
