El extitular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) Genaro García Luna permanecerá en prisión luego de que un magistrado no resolvió la solicitud de la defensa para continuar el proceso en libertad, con una fianza de un millón de dólares en espera del juicio, a petición de fiscales que aseveraron que existe un alto riesgo de fuga por los contactos que tiene.
La medida de Robert M. Levy se da luego de que dos de los tres avales de la garantía se retractaron; mientras que el tercer aval, un presunto extrabajador del mexicano, fue considerado insuficiente debido a que sus ingresos brutos no superaron los 45 mil dólares en 2018.
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Sin embargo, la defensa del exintegrante del gabinete de Felipe Calderón, a quien se le imputan cuatro cargos, como recibir sobornos para beneficiar al Cártel de Sinaloa, del capo Joaquín El Chapo Guzmán, falsedad de declaración, conspiración y distribución de drogas, aún puede presentar argumentos para una nueva audiencia, en busca de ser liberado, pero ésta aún no ha sido programada.
EL DATO: Abogados del exfuncionario acusan que las presuntas pruebas en su contra sólo son relatos de narcotraficantes que buscan desacreditarlo.
Previo a esta audiencia, los fiscales advirtieron el riesgo latente de que García Luna, quien podría enfrentar una condena de cadena perpetua, escape de las autoridades estadounidenses y advirtieron que ninguna propuesta de fianza es lo suficientemente buena contra una persona acusada de tener vínculos con grupos del crimen organizado.
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En una carta dirigida al juzgado en el que se espera el juicio en contra del mexicano, el fiscal del Distrito Este de Nueva York, Richard Donoghue, demandó que el exfuncionario continúe en prisión.
En tanto, el gobierno estadounidense insistió en que “el acusado tiene motivos fuertes para huir”, esto en relación con los nexos que tiene con el crimen organizado, a quien presuntamente ayudó a cambio de importantes sumas de dinero, montos que le permitieron vivir en ese país.
Asimismo, aseguró que la investigación en su contra se fortaleció porque “el gobierno identificó, posteriormente, testigos adicionales que declararán bajo juramento que el acusado acordó ayudar al Cártel de Sinaloa a cambio de millones de dólares en sobornos”.
En estas investigaciones, también se detalla que el exfuncionario capitalino recibió de manera constante millones de dólares a través de compañías con las que está públicamente afiliado, así como empresas fantasma, que tienen origen fuera de Estados Unidos.
Donoghue argumentó que García Luna tiene contacto con “funcionarios corruptos del gobierno mexicano y miembros del Cártel de Sinaloa”, considerada una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo.
Además, el fiscal señaló que el exsecretario declaró tener dificultades financieras que le impiden cruzar la frontera con México; sin embargo, el gobierno estadounidense constató que en los últimos años adquirió múltiples empresas inmobiliarias, valuadas en casi cuatro millones de dólares.
jmg
