Impulsa crisis mercado de abortivos sin receta

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Foto: larazondemexico

En medio de la cuarentena, Fernanda comenzó a buscar clínicas para abortar. Se sorprendió porque una  le ofreció llevar el tratamiento abortivo a su casa, sin consulta.

“Debido al Covid-19 te podemos enviar el medicamento y asistirle las 24 horas”, fue el mensaje que recibió de la clínica Profem.

“Me dijeron que el servicio a domicilio era para mujeres de otros estados que tenían que viajar a Ciudad de México y que tendrían que estar más expuestas al virus. Si eres de aquí, sí te piden que vayas a revisión y todo eso, pero, por ejemplo, si eres de Querétaro, te mandan los medicamentos. Obvio sin revisión previa en la clínica. No firmas nada, nada más pagas y ya”, detalló Fernanda de 29 años.

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Una investigación realizada por La Razón revela que hay diversos establecimientos que venden misoprostol y mifepristona para interrumpir el embarazo, y ante la pandemia llegan a domicilio pagando de 300 a 3 mil pesos. Sin embargo, no se hacen responsables de las complicaciones que puedan surgir durante o después del tratamiento.

La clínica Ginemujer —cuya licencia se lee: 18-AM-09-015-001—, oferta en su página web: “kit a domicilio a cualquier estado de la república o el extranjero. El kit incluye: medicamento, insumos adicionales, manual de uso y folleto de indicaciones de cuidados médicos y alertas. Atención telefónica con médico especialista las 24 horas”. Todo por 300 pesos.

En la página cytotecmexico.com, donde no se exhibe algún permiso o cédula profesional, se puede pedir una combinación de misoprostol y mifepristona por WhatsApp hasta por mil 899 pesos, y lo pueden mandar por servicio de paquetería o entrega “personal” en cualquier estación del Metro de la Ciudad de México.

El comercio de estos medicamentos debería ser regulado por la Cofepris. En marzo de 2019, pidió a la Policía Cibernética bajar la página pastillasparaabortar.mx, donde se vendían estos medicamentos. La institución argumentó que se violaron disposiciones a la Ley General de Salud.

Se reportó que la Cofepris detectó que la página carecía de permiso de publicidad, cédula profesional y certificado de especialidad vigente, así como el incumplimiento del Artículo 79. Fracción I del reglamento en Materia de Publicidad.

Ante el confinamiento por el virus, este mercado digital regresa y tanto el misoprostol como la mifepristona pueden ser adquiridos por WhatsApp, Facebook, farmacias con servicio en línea y Apps como Rappi.

Para Guadalupe Ramos, coordinadora en Jalisco del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de la Mujer (Cladem), es bueno que exista acceso libre de estos medicamentos para cualquier mujer que desee abortar; sin embargo, hay riesgos para la salud cuando no se brinda un acompañamiento que garantice el aborto seguro: “lo que se trata es que haya protocolos de actuación de atención y de cuidado desde la autoridad, porque no se puede dejar estas acciones de libre uso para la ciudadanía que puede no tener información completa o clara, pudiendo tener dosis equivocadas o una preparación inadecuada de cómo suministrar el medicamento, y esto puede conllevar ciertos riesgos”, dijo.

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