El pasado 10 de julio, un bebé de 8 meses de edad murió de COVID-19, en la Clínica 58 del IMSS en León, Guanajuato. Duró casi un mes hospitalizado, pero padecía una cardiopatía que se agravó con la nueva enfermedad. Aunque en México los índices de bebés fallecidos por Covid-19 son bajos, los datos arrojan una cruda realidad: existen comorbilidades que los hacen más vulnerables al virus SARS-CoV-2, según detalla un análisis de La Razón, realizado con los datos publicados por la Dirección General de Epidemiología.
De 79 menores, entre cero y cuatro años, que murieron, 55 tenían neumonía detectada en el cuadro clínico, cinco inmunodeficiencia, dos tenían hipertensión, tres obesidad, tres padecían una afección cardiovascular, uno padecía diabetes y 22 tenían otra comorbilidad no detallada.
La mayoría de esos 79 niños perdió la batalla contra la Covid-19 entre mayo y junio, principalmente en Ciudad de México, Estado de México y Oaxaca.
Pero estos datos son apenas la punta del iceberg. En México, más de dos mil 175 niños —entre 0 y 4 años— han dado positivo a coronavirus. De ese universo, 33 por ciento tuvo una o más comorbilidades: 295 padecieron neumonía por el cuadro clínico, 68 inmunodeficiencia, 55 obesidad, 54 afección cardiovascular, 37 asma, 32 diabetes, 29 hipertensión, 18 tuvieron tabaquismo, ocho insuficiencia renal, tres con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica y 117 tienen otra comorbilidad.
No se trata de comorbilidades que sólo afectan a los bebés, pues en México 73 por ciento de los adultos padecen, por ejemplo, obesidad, según datos del Inegi. Un tema que ha tomado relevancia, pues el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, ha informado que existen más de 40 mil muertes por Covid-19; sin embargo, es la misma cantidad de defunciones anuales atribuibles al consumo de bebidas azucaradas.
El doctor Carlos Dixon Olvera de la Rosa, pediatra y cirujano pediatra, explicó en entrevista con este rotativo que estas comorbilidades no son tan comunes en niños y tampoco están sobrerrepresentadas. “Los pacientes cardiópatas y con insuficiencia renal pueden tener mayor riesgo de mortalidad”, dijo.
“La obesidad, sin embargo, está directamente relacionada con el exceso de la ingesta de calorías, la cual puede deberse a factores genéticos, culturales, y hábitos familiares, los cuales deben atenderse en forma multidisciplinaria por los padres y el equipo médico calificado”, agregó.
El especialista recomendó a los padres de familia brindar la lactancia materna exclusiva durante seis meses del bebé, y el control del crecimiento y desarrollo del niño por un médico pediatra certificado en los dos primeros años de vida.
La Secretaría Ejecutiva del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna) ha informado sobre el aumento de fallecimientos de menores de edad por COVID-19; por esa razón pidió a los padres de familia reforzar las medidas de prevención, especialmente en niños menores de cinco años.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, los casos de niñas, niños y adolescentes con resultado positivo de SARS-CoV-2 pasaron de 84 a ocho mil 781 del 12 de abril al 21 de julio.
Hasta el momento no hay estadísticas de cómo se contagiaron, pues algunos casos son por contacto y otros por transmisión comunitaria. También existe un caso atípico ocurrido el pasado 17 de junio, luego del nacimiento de trillizos que dieron positivo en un hospital de San Luis Potosí.
La Secretaría de Salud local informó que se desconocía si los bebés se contagiaron en el hospital o si de alguna forma la enfermedad fue transmitida por la placenta de la madre durante el embarazo.
Los casos de recuperación también son emblemáticos. Luego de dos semanas de vigilancia y atención médica, Matías —de ocho meses de edad y quien fuera considerado el primer bebé con Covid-19 en CDMX— superó la enfermedad. Según declaró a la prensa su madre, Mariana Gody, su hijo presentó síntomas luego que ella regresó de España, tras un viaje de trabajo.
- El dato: Entre el 12 de abril y el 23 de julio se confirmaron nueve mil 178 contagios en menores de 17 años, siendo los adolescentes (12 a 17 años) el sector más afectado.
